Los New York Knicks cosecharon ayer una victoria ejemplar ante los Toronto Raptors (108-100) en el Madison Square Garden. La franquicia neoyorquina remontó un partido que al descanso parecía perdido y lo hizo con un parcial de 28-0 en el tercer cuarto. Sin duda, fue una remontada de equipo pero la gran actuación de Tim Hardaway Jr con 38 puntos, 6 rebotes y 7 asistencias en 37 minutos fue vital para lograr el balance 10-7.
Sin embargo, las cosas al descanso no eran tan felices. Los New York Knicks perdían por 13 y a Jeff Hornacek, ni a nadie, le gustaba la actitud defensiva del equipo, y no dudó en hacérselo saber a sus jugadores. Según uno de los jugadores con más experiencia en la liga, Courtney Lee, las palabras del entrenador no le gustaron por ser demasiado explícitas (como para decirlo a los medios) e intercambiaron puntos de vista entre todos.
Si algo ha cambiado en este equipo es que todos se pueden decir las cosas a la cara porque lo importante es ganar. Además, algunos jugadores han confesado que la intensa conversación fue un punto clave para mejorar el juego y cambiar el rumbo del partido. Un ejemplo de ello es Kristaps Porzingis, que al terminar el partido declaraba lo siguiente:
“Tuvimos fuertes palabras entre nosotros y hablamos sobre cosas que queríamos mejorar al salir en la segunda parte y jugar como un equipo diferente”.
Aparte de Kristaps Porzingis, que terminó con 22 puntos y 12 rebotes, también habló el MVP de la noche, Tim Hardaway Jr, de la importancia de la discusión en el descanso para cambiar el chip.
“Simplemente muchos de nosotros fuimos al descanso a dejar claro que no podíamos cometer errores como esos en defensa. Muchos de nosotros estábamos disgustados”.
Otro factor clave de las últimas victorias del equipo ha sido Courtney Lee, que se hablaba de que podía quedarse sin hueco en los New York Knicks pero que, sin embargo, ha recuperado una de sus mejores versiones. Jeff Hornacek ha sabido ubicar a los dos al mismo tiempo y que ayuden a la franquicia. De hecho, al final del encuentro, el entrenador se deshizo en elogios con ambos escoltas:
“Ambos son de esos jugadores que pueden ser armas y servirte en ambos lados de la cancha”.
Los New York Knicks llegan al descanso de acción de gracias (festividad importante en Estados Unidos) con un balance de 10-7 y un quinto puesto en la conferencia Este empatados con los Philadelphia 76ers. Ahora el equipo debe pensar en sus dos siguientes encuentros, back to back, primero contra Atlanta Hawks y después contra los Houston Rockets.