La expulsión de LeBron James por doble técnica ante Miami Heat sigue estando en boca de todos. Primero habló Enes Kanter, que se ha consagrado esta temporada como enemigo público número 1 de James, y después lo hizo el árbitro, para mantenerse firme en su decisión («se giró y lanzó un puñetazo en el aire. Después se me acercó a la oreja y utilizó un lenguaje vulgar»), por lo que sólo faltaba conocer la opinión del protagonista del suceso.
Pero LeBron ahora es un tipo feliz, y no entra en polémicas. Lo dejó bien claro en Uninterrumpted, web en la que suele colgar vídeos hablando sobre diferentes temas. En este último, centró su speech en la racha del equipo, aunque dejó caer el tema de su expulsión, eso sí, con sentido del humor:
«Estaba siendo una distracción para el equipo y por eso lo mejor era salir expulsado. Por eso ganamos el partido».
Carcajada y cambio de tema. Porque a LeBron no parece haberle afectado mucho ser enviado al vestuario antes de tiempo por los árbitros por primera vez en 1082 partidos. Peor estaría, seguro, si el resultado hubiera sido desfavorable, pero es que estos Cavs, ahora mismo, no se desmoronan cuando no está en la cancha, algo que sí sucedía apenas un mes. Y James está muy contento por ello:
«Ganar nueve partidos seguidos tras haber añadido hace nada a siete jugadores nuevos a la plantilla es muy difícil. Muchos no nos conocíamos, ni en la pista ni fuera de ella. Al principio de la temporada no había confianza, pero creo que hemos ido haciendo piña y creciendo con cada viaje, con cada partido. Ya empiezan a verse los resultados».
Una gran racha a pesar de las importantes bajas que sufre actualmente el equipo, como bien hace mención el ’23’ en un mensaje motivador que manda a la gente de Cleveland.
«The Land, tu equipo está de vuelta y todavía no tenemos a Tristan Thompson de vuelta. Tampoco a Isaiah Thomas ni a Derrick Rose. Queremos más. Miramos al futuro, pero ahora vamos a seguir así hasta que la plantilla entera esté disponible, para lograr que esto siga avanzando».