Este verano los Detroit Pistons se quedaban sin el pívot Aron Baynes que se fue rumbo Boston. Y por ello se pusieron en marcha para encontrar otro jugador que pudiera cubrir su baja y ser el tercero en la rotación. Además de estar dispuesto a jugar por el mínimo. Ese otro jugador fue Eric Moreland, viejo conocido de la directiva, ya que participó con el equipo en la Liga de Verano de Orlando de este año. Con unos números más que decentes: 7.6 puntos, 8.4 rebotes y 2.8 tapones por partido, se decidió por ficharle con un contrato de 3 años y 5, 48 millones de dólares. Un jugador físico que ofrecería defensa contra 5 abiertos o más ágiles y, sobretodo, rebote. Al fin y al cabo, iba a ser el último en su puesto. Aunque actualmente juega de forma sorpresiva como suplente de Drummond.
Con un contrato que estaría parcialmente garantizado. Asunto que puede hacer que sea difícil salir a jugar sin saber si se va a continuar. El primer millón se garantiza al empezar la temporada, y el primer año de sueldo el 10 de enero, último día en que un contrato puede estar plenamente garantizado. La siguiente temporada sería igual de complicada para Moreland, con el segundo año no garantizado hasta julio. Y en el que se repetiría el mismo patrón en los otros dos años restantes del contrato. Es decir, hasta julio no estaría asegurado ese año, luego se cobraría una parte al inicio de la temporada y el resto el 10 de enero.
Si bien Moreland conoce perfectamente esta fecha para el devenir de su contrato, no permitirá que esto afecte su concentración. Esto dijo al ser preguntado sobre su situación:
«No estoy pensando en fechas ni en cómo está estructurado, solo intento salir y hacer lo que mejor hago. Nada va a cambiar».