Los Suns miran hacia el futuro con esperanza tras haber elegido al número uno del Draft, Deandre Ayton. En su plantilla ya cuentan con jóvenes promesas como Devin Booker, Josh Jackson o el novato Mikal Bridges. En Arizona llevaban mucho tiempo esperando este momento, pero la plantilla no está completamente cerrada. El ‘roster’ de Kokoskov tiene una pieza suelta desde el inicio de la pasada temporada cuando Eric Bledsoe decidió poner fin a su periplo en los Suns.
Desde aquel entonces, no han sido capaces de encontrar un base sólido de garantías en el que confiar noche tras noche. Inicialmente, Mike James parecía haberse hecho con el puesto, aunque tras finalizar sus días permitidos en la NBA por su contrato de dos vías, tuvo que marcharse, siendo los Pelicans un trampolín que acabaría llevándolo de nuevo a Europa, y de nuevo al Panathinaikos.
Mientras tanto, la franquicia esperaba que el desarrollo de Tyler Ulis fuese suficiente para esperar la recuperación de un Brandon Knight que no cuajó durante las noches en las que pudo vestir la camiseta de los Suns antes de lesionarse. También pasaron caras conocidas de la NBA como Isaiah Canaan, aunque las lesiones volvieron a dejar su huella en este equipo. Por otro lado también tuvieron el proyecto de Elfrid Payton que nunca terminó de funcionar.
Tras un verano largo donde los Suns han sido unos de los protagonistas, se encuentran con el mismo dilema de siempre. Tyler Ulis fue cortado y Brandon Knight salió traspasado en el movimiento que sacó a Ryan Anderson de Houston. Estos jóvenes Suns quieren competir y están decididos en traer a un base de altura para completar ese proceso en el que tanto tiempo llevan estancados.
Apuntan alto
En un primer momento, John Gambadoro de Arizona Sports, filtró que los Suns estaban buscando un gran nombre para incorporarlo al equipo como base titular. Los tres principales nombres en esa lista eran Damian Lillard, Kemba Walker y Terry Rozier. Finalmente, se quedó únicamente en un deseo, ya que no lograron llegar a un acuerdo con ninguna de las franquicias para efectuar un traspaso. Nadie en su sano juicio (excepto Danny Ainge) estaría dispuesto a dejar marchar a jugadores de ese calibre tras las exhibiciones que han dado en la pista para sus respectivos equipos.
Nuevos objetivos
John Gambadoro volvió a actualizar esta carrera particular que han iniciado en las oficinas de Phoenix para conseguir un base de garantías. Los nuevos nombres que han sonado con fuerza en las últimas horas son Patrick Beverley, Spencer Dinwiddie y Cory Joseph, tres jugadores que parecen estar algo más a la altura de lo que pueden ofrecer los Suns. Una de las prioridades de Kokoskov es dejar que Booker juegue algunos minutos de base para intentar lograr esa transformación por la que ya pasaron jugadores como James Harden.
En esta búsqueda, su mejor elección sería un base capaz de cubrir ambas posiciones del ‘backcourt’ para dar más flexibilidad a un Booker que no se ha visto muy cómodo en los anteriores años en las contadas ocasiones que le tocó ejercer de base. El nombre que más ha llamado la atención es el de Beverley, quien ya se complementó a la perfección con Harden y es el modelo que quieren seguir en Phoenix.
Los Suns tratarán de lograr un acuerdo de traspaso con algunas de estas franquicias, aunque por el momento poco se sabe sobre la intensidad de las negociaciones con el resto de organizaciones. Dinwiddie mostró buenos flashes en Brooklyn y podría desarrollarse por completo en un equipo donde podría tomar las riendas al completo del puesto de base puro.
Cory Joseph ha tenido un gran paso por la NBA hasta el momento siendo una pieza importante en todos los equipos en los que ha estado, aunque sin ser el protagonista. Los Suns le ofrecerían algo que nunca ha experimentado y podría ser una gran oportunidad para consagrarse como un titular en la competición.