OPINIÓN | La Mesa Redonda: ¿Cuál es la mejor opción para la NBA?

La NBA se enfrenta estos próximos meses a una situación sin precedentes. La crisis del Coronavirus (COVID-19) ha obligado a Adam Silver a detener indefinidamente todo tipo de actividad baloncestística; entrenamientos y partidos.

En vistas a los siete casos que, a día de hoy, tiene la competición (Marcus Smart, Kevin Durant, Rudy Gobert, Donovan Mitchell y otros tres jugadores más, uno de los Lakers y otros dos de los Nets), no se prevee una vuelta temprana de dicha actividad, pero nosotros, que de gerencia tenemos nula idea, y de imaginación estamos sobrados, vamos a solucionar este problema. ¿Qué opciones tiene la liga para retomar la competición? Aquí van las nuestras.

La locura (por Juanpe Belmonte)

Con el parón del Coronavirus en la NBA, la pregunta para todos los aficionados es la misma ¿cuándo vamos a volver a la normalidad? Opiniones hay muchas y muy diversas así que voy a exponer la mía, que no deja de ser algo fuera de lo normal y que no se ha comentado mucho hasta el momento para aportar algo de originalidad.

Mientras muchos otros defienden que se alargue la temporada lo máximo posible para retomar el curso por el mismo punto que lo dejamos, voy a colocarme en el lado contrario. No creo que lo mejor sea la suspensión definitiva, porque me extrañaría mucho no poder tener un campeón en 2020… pero tampoco pienso que terminar a mediados de agosto sea la mejor alternativa, sobre todo para los que nos dedicamos a informar sobre esta competición. Alterar el calendario de esta manera sería claramente negativo, no solo para los jugadores que se perderían la posibilidad de participar en los Juegos Olímpicos, sino también para los periodistas… ¡es que nadie piensa en que nosotros también merecemos unas buenas vacaciones de verano!

Por lo tanto, tirando un poco de imaginación y de los rumores que han aparecido desde el inicio de la presente temporada con los posibles cambios para la 2021-22, se me ha ocurrido una alternativa un tanto curiosa basándome en el formato del fútbol modesto para ascender de categoría. Me gustaría que la temporada regresara directamente con los Playoffs, pero teniendo en cuenta que la diferencia entre el octavo y el duodécimo es tan corta en el Oeste, habría que hacer algún tipo de Playoffs alternativos para decidirlo de la manera más justa posible.

Una lucha encarnizada en una eliminatoria entre el 8º y el 13º — por seleccionar un abanico viable matemáticamente — sería una alternativa bastante curiosa. Mi propuesta es un torneo a partido único en campo neutral en ambas Conferencias para determinar quién se llevará el último puesto de los Playoffs. Se puede tomar el modelo de las competiciones coperas europeas como la española, y reducirlo en un calendario simplificado en cuatro días o una semana repleta de acción que sirva como aperitivo perfecto antes de brindar a todos los aficionados el gran plato principal que todos esperan. Eso sí, esta propuesta conllevaría una reducción considerable de los partidos de las primeras eliminatorias, por lo que hacerlo al mejor de cinco en las dos rondas antes de Finales de Conferencia, sería una opción que habría que poner sobre la mesa.

Cuestión de prioridades (por Joan León)

Se barajan diferentes opciones sobre el posible regreso de la NBA, pero se elija la opción que se elija, no todos los equipos estarán conforme. La decisión puede beneficiar a algunas franquicias pero perjudicar a otras, no solo en referencia al título, también influyendo en el número de ingresos económicos de cada equipo si se pasara directamente a los Playoffs. El hecho más importante en estos momentos es que indiferentemente del formato, se garantice la salud de los jugadores y miembros de la organización de cada equipo. Una vez eso esté asegurado, elegir.

Personalmente, creo que está situación excepcional que estamos viviendo puede ser el momento perfecto para probar un formato diferente al convencional. Ya hace varias temporadas que se habla sobre modificar el bracket de los Playoffs y que se disputen sin restricciones de conferencia. Creo que este es el momento perfecto y la opción que quizás sería “más justa”. Cada vez más, la competencia oeste se consolida como la más “salvaje” de la NBA por encima del Este y así tendrían plaza garantizada los equipos con mejor récord en la liga regular.

Dicho esto y dependiendo de cuando regrese la competición, cogería a los 8 equipos con mejor registro, sin importar la conferencia y que se disputen los Playoffs. Si se retomara a tiempo para iniciar los Playoffs desde primera ronda, adelante. Pero si volviera la liga más tarde, haría que se disputen las eliminatorias desde la semifinal de competencia, intentando que la liga no se prologue demasiado. Que se pueda llevar a cabo el Draft y los otros eventos de la liga en las fechas previstas al inicio de temporada, teniendo en cuenta que, en teoría, este año hay los Juegos de Tokio (veremos si se disputan).

Si se aplazan los Juegos Olímpicos y se alargara la temporada, puede incentivar a que la siguiente temporada se reduzcan el número de partidos que se disputan en la liga. Una propuesta que hicieron los jugadores al comisario de la competición. Lo que está claro es que, pase lo que pase, este año va a traer cambios en la NBA.

Competiciones paralelas (por Adrián Senés)

Como es obvio, todo depende de cuando se acabe esta situación tan… excepcional. Sin duda, a la NBA lo que más le interesa es que la normalidad vuelva pronto y todo siga más o menos igual. Es decir, haya tiempo a que se pueda jugar algo de temporada regular, aún cogiendo algo de tiempo de Playoffs, que estos fueran un poco más cortos (jugando, por ejemplo, la primera ronda a 5 partidos) y reduciendo un poco la postemporada. Pero todo apunta a que esto no será así y la dura realidad obligará a tomar medidas más drásticas.

Así pues, a título personal, veo difícil recuperar la competición antes de junio, y una posibilidad podría ser el reducir la temporada a unos Playoffs renovados. Es decir, separar la liga en dos partes, sin diferenciar conferencias, los que tienen posibilidades de título, por mi remotas y casi inverosímiles que parezcan. Por ejemplo, Dallas Mavericks estarían en este grupo, y los demás. El primer grupo jugaría unas eliminatorias por el título a vida o muerte, sin importar si pertenecen al Este o al Oeste. Quizá, incluso, teniendo en cuenta que los Mavericks ocupan la plaza décimo tercera y que a partir de ahí el salto a nivel de victorias es grande (40 de los tejanos por 32 de los Grizzlies, sus más inmediatos seguidores a día del parón), se pueda jugar antes una promoción entre los ocho equipos que podrían pelear un Playoffs. Los propios Memphis, Nets, Magic, Blazers, Kings, Spurs y Suns, a los que esto supondría una oportunidad ya que están algo más lejos.

Por otra parte, el resto de equipos, para no estar sin competición desde marzo hasta octubre, podría jugar una competición paralela donde el mayor incentivo sería perder mucho y conseguir una mejor posición en el Draft. Esta parte es la que más chirría, porque la NBA no está a favor de separar su competición entre equipos buenos y malos, como si fueran diferentes divisiones, y menos todavía en fomentar una liga en la que el premio se gana cuando se pierde. Desde luego, iría contra el espíritu competitivo, pero evitaría las millonarias pérdidas de estos equipos sin jugar.

Por el lado bueno, además de lo preciosa que estaría la lucha por el título, podría servir de campo de pruebas para una de las hipótesis que se plantean para el futuro: los Playoffs eliminando conferencias. Además, supondría retrasar la fecha del draft a que acabe la liga de los peores clasificados y, muy probablemente, retrasar también la fecha de inicio de la próxima temporada. Esto también supondría una buena prueba al otro debate que existe sobre la mesa, el de reducir la carga de minutos y partidos a lo largo de un año.

Lo que es seguro, es que la NBA no va a dar por perdida la temporada.

Mix en la batidora (por Javier Expósito)

Antes de nada, dejar algo claro. Lo primero es la salud de las personas. Lo segundo, es la salud de las personas. Lo tercero, y sin que sirva de precedente, es la salud de las personas. Y lo cuarto y último, la salud de las personas. Que nadie se contagie es la única opción que debe sopesar la NBA. Y si la liga tiene que estar parada seis meses, habrá que hincharse a partidos de la 2013-14. Pero si es posible, el panorama se calma y se puede volver a jugar, si y sólo si el riesgo para toda persona vinculada a la liga es nulo, la solución deberá componerse de diferentes encajes. Solventar pequeños frentes para cuadrar la situación completa.

Primero, los tiempos. Si esta crisis hubiera llegado en octubre, o en noviembre, el modelo de lockout habría funcionado a las mil maravillas. Cancelas la temporada hasta el mes de enero, y ruedas desde allí. Pero llega en pleno Marzo, con la temporada en su auge y los equipos con todos los cañones apuntando, no sólo tienes que preocuparte de que la temporada acabe de la manera más justa para todos, sin omitir partidos ni saltando directamente a la post-temporada, sino que acabe lo suficientemente pronto como para poder celebrar las Finales, el Draft de la NBA, ofrecer el tiempo de descanso suficiente a los jugadores de cara a los Juegos Olímpicos de Tokio y, a la vez, ofrecer el mismo tiempo de tregua de cara a la al inicio de temporada 2020-21.

Por lo tanto, y como primera medida, yo me iría olvidando de dos cosas; de todos los partidos que quedan por jugar y de la pretemporada 2020. Evidentemente, fundamental es acordarse de que aún estamos ante la incertidumbre de las cuarentenas y de cuánto tiempo le queda al virus para devolvernos la vida que nos está arrebatando, pero tenemos que evitar con todo el peso del reglamento que los jugadores extremen su ritmo de partidos y, por Dios, que la temporada no acabe en agosto. Con estas dos medidas, como mínimo, se rescata un mes de competición.

El siguiente objetivo es el de acabar la temporada. Encontrar la manera de ser lo más justo posible con todos los equipos. Y entender, sobre todo, que hay equipos que necesitan diferentes maneras de ser justo por parte de Adam Silver. Entender que hay equipos que están arriba, hay equipos que están abajo… y hay equipos que están en el medio. De todas las ideas que se han expuesto a lo largo de todo este tiempo, la del señor Juan Pedro es una de las que más me seducen. Sería interesante el modelo futbolístico para decidir esas octavas plazas de conferencia, y a su vez, ser todo lo justo posible, además de tener ese plus competitivo que sería altamente atractivo tanto para los jugadores como para los propios aficionados.

Abogar por el modelo europeo de Playoffs, con eliminatorias a cinco partidos, posibilitaría ese playout. Seguiría siendo un baremo lo suficientemente extenso como para decide qué equipo merece más la victoria en una serie, y sería más oxígeno todavía para el calendario, y a la vez, daría el tiempo suficiente para poder acabar la regular season, la menos regular de todas. Concretándolo un poco más, se dividen los equipos en tres grupos de cinco en cada conferencia, juegan entre ellos a lo largo de dos/tres semanas para definir las posiciones que quedan, se esclarece el orden del Draft 2020 (un Draft que, por cierto, debería hacerse lo más rápidamente posible), y se pueden jugar los Playoffs. Con que a principios de mayo pudiera volverse a jugar, sería suficiente.

En conclusión. Sin pretemporada el año que viene (que flaco favor le viene haciendo a la liga últimamente), sin sextos ni séptimos partidos, un Draft exprés, a mediados-finales de junio se están jugando las Finales y en agosto los Juegos. Y todos contentos.