Sé que muchos de ustedes conocen la existencia de un español llamado Sebastián Sáiz, que juega con los Ole Mississippi Rebels, muchos recurrirán al box score para ver sus números y no estarán impresionados, pero lo he visto jugar, y mucho, lo que me da la base suficiente para decirles que es un jugadorazo. Nuestro protagonista se ha adueñado de la posición de center titular en el equipo que (para bien o para mal) lidera Marshall Henderson. La estatura del ibérico son 6’9, pero lo que podrían ser pocos centímetros para el puesto que desempeña, lo compensa con una energía y una garra que se ve en jugadores como Joakim Noah, batallando en ambos costados de la cancha sin dar ninguna bola por perdida.
Tenemos que recordar que el madrileño es apenas un freshman, por lo cual tiene mucho margen de mejora. Con el tiempo su coach, Adam Kennedy, le irá dando más responsabilidad que seguro asumirá. Su “career high” en puntos fueron 20 y llegó en el 3er juego de la Conferencia vs LSU el 15 de enero de este año, ese partido se fue a OT y Saiz agregó 9 reb, 1 ast, 1rob y 2 blq con victoria para su equipo. Su tope en rebotes han sido 11 en tres oportunidades y la máxima cantidad de bloqueos en un juego fueron 3 vs Mississippi State. Tuve la oportunidad de ver ese enfrentamiento regional y recuerdo que uno de los “gorros” levantó a los fanáticos de sus asientos, porque además la bola golpeó al jugador taponado devolviéndole la posesión a Ole Miss.
En los primeros 10 minutos de juego vs Kentucky tuvo 6 pts, incluyendo un fuerte mate y luego un doble paso que finalizó con gancho sobre Cauley Stein. Sáiz nació en 1994 y por ahora no es conveniente hablar de su futuro de cara al baloncesto profesional, vamos a disfrutar de él en su año rookie, en una Conferencia Southestearn que, año tras año, acumula muchos jugadores talentosos con potencial NBA, la mayoría concentrados en Kentucky y Florida, por lo cual el español tendrá que enfrentarse a un nivel exigente que medirá su evolución o no.
En las características de su juego resalta la velocidad, que usa en ofensiva para ganarle la posición a sus rivales y en el otro costado, siendo un defensor muy correcto sin meterse en problemas de fouls. Va bien al rebote ofensivo, proporcionándole segundas oportunidades a su equipo, sabe colocar pantallas debajo del aro. Su inteligencia es notable, debe mejorar mucho aún, sobre todo su tiro de media distancia. Debido a que he visto mucho a Ole Miss pronto escribiré algo sobre el venezolano Anthony Pérez, un SF sophomore que ha progresado bastante respecto a su año freshman.