LeBron James ya entrenó ayer con normalidad – salvo el partidillo típico – con los Miami Heat y se dá casi por sentado que volverá a las canchas esta noche frente a los New York Knicks en el Madison. Recordar que LeBron es baja desde que el jueves pasado pasada se fracturase la nariz en un lance del juego con Serge Ibaka en la victoria de los de Miami frente a Oklahoma City Thunder. Tras el choque, LeBron abandonó la cancha y radiografías posteriores confirmaron la fractura.
Tras la práctica, LeBron declaró estar con muy buenas sensaciones: «Está curado, pero tampoco me han dado un golpe aún en la nariz», y habló sobre la posible protección que usará mañana: «Es un desafío difícil se siente como algo, como que alguien tiene una mano puesta en tu cara constantemente, es un defensor adicional que tú no quieres encima”. Pese a que en el citado entrenamiento James no usó máscara protectora, es de suponer que sus compañeros estaban atentos a no propinarle golpes en la zona afectada, es más que probable que esta noche sí que luzca dicha protección.
También hizo declaraciones sobre si tiene miedo a recibir algún golpe en la zona afectada o si el hecho de llevar máscara haga que sus rivales le vean como a un animal herido, la respuesta, taxativa: «Cuando tengamos contacto físico, será como un partido. Vamos a jugar duro. Tenemos un equipo de hombres alfa. Hoy era sin contacto físico para mí, pero sí lo había para el resto de estos tipos. Yo simplemente no estoy listo para ello en este preciso momento».
La reaparición, parece claro, esta noche en el Madison Square Garden.
@eugmanso
