A pesar de los aproximadamente 22 millones de dólares que a Amar’e Stoudemire le quedan por cobrar de los Knicks si aplicase su cláusula Player-option, desde NY se ha filtrado que se le ha ofrecido un puesto en el Hapoel de Jerusalén, equipo del que es dueño. El ofrecimiento habría venido de la organización israelí, ha tomado parte en su confección, que pretende dar un salto de calidad definitivo tras ser este año el mejor equipo de Israel.
Y es que el Hapoel ha mejorado en gran medida desde que un grupo inversor americano, del cual el ala-pívot forma parte, lo adquiriese. Han superado las expectativas de este año al lograr esa primera posición en la liga israelí con la que pocos contaban. De hecho, ya se apunta desde el equipo que se pretende conseguir que la marca Hapoel sea tan reconocible en el exterior como la del Maccabi de Tel Aviv, un grande de Europa que seguro que intentará volver a lo más alto de su competición nacional.
Además, aprovechando que no parece que el ex de los Suns vuelva a recuperar su mejor nivel y que vaya a haber muchos cambios en los Knicks con Jackson al mando, se le está metiendo presión a un jugador que afirma tener raíces judías. No hay ninguna duda que si la antaño estrella de los Knicks decidiese «retirarse» en su equipo en unos años, éstos ganarían muchos enteros para por lo menos pasar de fase de grupos en Euroliga. Aunque, son solo cuentas de lechera…
No parece probable que con tan suculento contrato y en plena recuperación de sensaciones, el de Florida vaya a coger las maletas y abandonar la NBA, pero la prensa estadounidense ya le ha preguntado sobre ello a lo que ha respondido que:
«El futuro es desconocido, y por lo tanto, si tengo una oportunidad de jugar en Israel y aún estoy bien de salud, estaría genial».
No se moja, pero parece que la idea le seduce. Puede que sea la próxima estrella de las ligas europeas.
FUENTE: NEW YORK POST