El comienzo del camino hacia la gloria

La temporada en los Clippers comenzaba con la adición principal proveniente del banquillo: llegaba Doc Rivers al, históricamente,  ‘otro’ equipo de Los Angeles para convertir inmediatamente a la franquicia en aspirante.

El equipo llegaba a la temporada 2013-14 tras una gran decepción la campaña anterior bajo los mandos de Vinny Del Negro, cayendo en primera ronda ante Memphis Grizzlies por 4-2 y dando una pobre imagen, al no dar muestras de saber competir (en esa serie se pusieron 2-0, pero acabaron perdiendo cuatro partidos consecutivos). En la 2012-13, los Clippers acabaron con un récord de 56-26 (quinto mejor balance empatados con Memphis).

La campaña que acaba de concluir empezaba, como antes hemos comentado, con la llegada de Doc Rivers, uno de los mejores entrenadores de la liga y que es uno de los cuatro aún en activo que tienen al menos un anillo (junto a Gregg Popovich, Rick Carlisle y Erik Spoelstra). Rivers llegaba con mucho ilusión por empezar un nuevo proyecto tras dar por concluida su etapa en Boston, en la que ganó el anillo en 2008. El entrenador de Chicago le ha dado a los Clippers un empaque diferente en su primer año y en el segundo ya se les puede considerar como aspirantes al título. La temporada la acabaron en la tercera posición de la competidísima Conferencia Oeste, tras San Antonio Spurs y Oklahoma City Thunder, con un récord de 57-25, gracias a lo que se llevaron el título de la Pacific Division por segunda vez en su historia, quedando por tanto por encima de su vecino, con el que comparten pabellón, los Lakers.

En cuanto a la confección del roster, no hubo demasiados cambios importantes. Se hacían con los servicios de Byron Mullens, Stephen Jackson, Darren Collison, J.J. Redick y Jared Dudley antes del inicio de la temporada para dar un impulso a su banquillo y reforzar la posición de alero. Abandonaban el equipo Caron Butler, Chauncey Billups, Lamar Odom, Eric Bledsoe y Grant Hill. De entre todos los fichajes, únicamente Darren Collison y J.J. Redick cumplieron con lo que se esperaba. Collison siendo un gran backup de Chris Paul y Redick anotando desde la larga distancia. Sin embargo, ni Mullens (se esperaba que cumpliera como interior reserva que abriera espacio con su lanzamiento exterior) ni Jackson (duró en el equipo solo 9 partidos) ni Dudley (no rindió como se esperaba a pesar de contar con muchos minutos, por lo que Matt Barnes acabó arrebatándole el puesto) estuvieron a la altura.

La regular season transcurrió con mucha tranquilidad y siguiendo una regularidad impresionante en sus victorias, solo habiendo encadenado 2 derrotas consecutivas en 5 ocasiones y nunca llegando a las 3 derrotas seguidas. Además, a mediados de la temporada llegaron al equipo agentes libres veteranos que aportaron y tuvieron importancia como Glen ‘Big Baby’ Davis, Hedo Turkoglu y Danny Granger.

Así, con un balance de 57-25 y quedando en la tercera posición en el Oeste, los Clippers llegaban a los PlayOffs y se enfrentaban a los Golden State Warriors en Primera Ronda. Los fantasmas del año pasado aparecían al perder el primer partido por 109-105, aunque a partir de entonces fueron bastante superiores en el conjunto de la serie, a pesar de que pasaron de ronda por 4-3. Esta serie estuvo salpicada por el caso de racismo del entonces dueño de la franquicia, Donald Sterling.

En las Semifinales de Conferencia Oeste esperaban los Oklahoma City Thunder. Entonces, empezaron ganando el Game 1 por 122-105, pero a partir de entonces los Thunder les superaron y acabaron sucumbiendo por 4-2.

Los tres jugadores más destacados fueron:

Blake Griffin completó la mejor temporada de su carrera, colándose en el top-3 en la carrera por el MVP y multiplicándose para que la lesión de Chris Paul no se notara apenas en el rendimiento del conjunto. ‘The Cyborg’, en su tercera temporada en la NBA, consiguió promediar 24.1 puntos (52.8% TC; 27.3%; 71.5% TL), 9.5 rebotes, 3.9 asistencias, 1.2 robos, 2.8 pérdidas, 0.6 tapones. Y ya no son solo los números lo que impresiona, sino el salto cualitativo en su juego. Griffin ahora puede lanzar desde media distancia con efectividad, asistir, botar el balón, conducir él mismo los contraataques y, como siempre, finalizar con mates tremendos. Hay que recordar que el de Oklahoma City promedió en la temporada 2012-13 18.0 puntos, 8.3 rebotes, 3.7 asistencias. Si todo esto fuera poco, es muy remarcable su evolución en el aspecto defensivo, donde ha pasado de ser el eslabón débil en la cadena defensiva de LAC para contribuir de forma activa compenetrándose de forma excelente con DeAndre Jordan, que reduce sus defectos atrás.

Chris Paul fue el mejor jugador del equipo hasta que cayó lesionado, perdiéndose 22 partidos en total. Aun así, CP3 fue incluido como el base del mejor quinteto de la temporada 2013-14, refrendando de esta forma su estatus de mejor point guard del mundo. Promedió en regular season 19.1 puntos (46.7% TC; 36.8% T3; 85.5% TL), 4.3 rebotes, 10.7 asistencias, 2.5 robos, 2.3 pérdidas. Fue el único jugador en promediar un doble-doble en puntos y asistencias en la 2013-14 y empezó la campaña en un estado de gracia impresionante, tanto que rompió el récord de dobles-dobles en pts y asistencias para empezar una temporada de Magic Johnson, que lo había dejado en 11 en la temporada 1990-91. Paul consiguió 13 dobles-dobles al comenzar la temporada 2013-14, algo histórico. El menudo base ha añadido a su arsenal un certero lanzamiento desde la larga distancia, como bien demostró en PlayOffs.

El jugador que más mejoró en Los Ángeles Clippers fue DeAndre Jordan. Bajo la batuta de Doc Rivers, que a su llegada le consideraba capital para el funcionamiento defensivo del equipo, ha dado un gran paso adelante en su juego. El center de Houston ha sido el baluarte del conjunto en defensa, aprovechando por fin sus bestiales condiciones físicas gracias a las nuevas funciones en el equipo que se le asignaron y a la mayor confianza depositada sobre sus hombros. Promedió 10.4 puntos (67.6% TC; 42.8% TL), 13.6 rebotes, 0.9 asistencias, 1 robo, 1.5 pérdidas, 2.5 tapones. De hecho, DeAndre Jordan quedó tercero en las votaciones para el DPOY, solamente tras Joakim Noah y Roy Hibbert. Además, el pívot ha sido el encargado esta temporada de hacer el papel de capitán, es decir, de integrar a los rookies, motivar a sus compañeros y hacer que reine el buen rollo en el vestuario.

No hay que olvidar al Sexto Hombre del Año, Jamal Crawford, que completó la que probablemente es la mejor temporada de su carrera, promediando 18.6 puntos (41.6% TC; 36.1% T3; 86.6% TL), 2.3 rebotes, 3.2 asistencias, 0.9 robos, 2.0 pérdidas. Pero sobre todo, su temporada más completa.

«Siento que este año he sido mejor que nunca. Es algo que le debo a los entrenadores y compañeros. Ahora me preocupo por la defensa», comenta Jamal Crawford sobre su actuación en la 2013-14.

En el Draft de 2014, los Clippers eligieron a C.J. Wilcox, un gran lanzador exterior con buen manejo de balón que finaliza bien cerca del aro. Además es un defensor con un gran potencial si coge más músculo.

Factores positivos/negativos

Positivo. Blake Griffin y DeAndre Jordan. Los Angeles Clippers tienen una pareja interior y que se complementa a la perfección para mucho tiempo. Como ya señalaba anteriormente, los dos interiores han mejorado mucho durante la campaña que acaba de terminar y parece que esta proyección se mantendrá. En defensa, DeAndre Jordan tapa las carencias de Blake Griffin con su intimidación en las cercanías del aro. En ataque, es ‘The Cyborg’ quien, con su capacidad para anotar desde media distancia y en el poste, tapa las debilidades de Jordan, que anota valiéndose únicamente de su físico.

Negativo. La barrera de las Semifinales de Conferencia. Se ha puesto en duda la capacidad para liderar un proyecto de Chris Paul tras la eliminación a manos de los Thunder. Aunque es muy injusta tal conclusión, al menos a raíz de esta temporada, ya que es la primera con un entrenador como Doc Rivers por lo que el equipo todavía no se ha amoldado del todo lo que quiere el ex jugador de Atlanta, New York, San Antonio o los propios Clippers. Es cuestión de tiempo que el equipo se consolide y pueda ser un verdadero contender. Chris Paul o Blake Griffin nunca han alcanzado las Finales de Conferencia.

Positivo. El cambio de head-coach. Sustituir a Vinny Del Negro por Doc Rivers siempre es una buena operación. Y eso a pesar de que Rivers le costó a LAC una primera elección de draft y su salario es muy elevado, pues tiene un contrato de 3 años a razón de 21 millones de dólares. El head-coach ha conseguido que DeAndre Jordan consiga ser el ancla defensiva del equipo y que sea regular, cosas que no era ni por asomo antes de su llegada. A esto se le suma su capacidad para hacer que sus jugadores lo den todo en la pista y haya una gran química en el vestuario. Y, cómo no, su pizarra para trazar jugadas.

Valoración SomosNBA

Vamos a valorar la temporada de los Clippers del 1 al 10, siendo “1″ una temporada desastrosa y “10″ una temporada perfecta. Al comienzo de temporada, la llegada de Doc Rivers creó unas expectativas demasiado altas en el equipo, más que nada por ser su primera temporada al mando no se podía esperar el asalto del anillo. La regular season fue buena, acabando con un balance de 57-25 y en la postemporada superaron a los Warriors en siete partidos y cayeron ante los Thunder en seis encuentros.

La nota que le pone el equipo de SomosNBA a la temporada de

Los Angeles Clippers es…

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