El training camp, aunque muchos aficionados lo vean como la antesala de una nueva temporada, realmente tiene la misma trascendencia que el final de la regular season para los equipos que no están en PlayOffs. Es decir, cualquier entrenador tiene ya tomadas el 90% de sus decisiones, y estas tres semanas de partidos amistosos y entrenamiento solo sirven para refutarlas. De este modo, el primer descarte de New Orleans Pelicans ha sido Vernon Macklin.
De hecho, el exjugador de Detroit no había participado en ninguno de los tres partidos de preparación que lleva disputados el equipo de Monty Williams. De este modo, y tras la marcha de Vernon Macklin, actualmente cuentan con 18 jugadores, de los cuales todavía quedan tres por salir, y que casi con toda seguridad serán los mismos que han llegado a última hora para hacer la pretemporada, es decir, Kevin Jones, Dionte Christmas y DJ Stephens.
El resto del equipo será la base sobre la que Monty Williams tiene la idea legítima de asaltar los PlayOffs. Así pues, la salida de Vernon Macklin, cuya última andadura profesional estaba en los Liaoning de la liga China, marca la hoja de ruta que tienen los Pelicans prevista antes del inicio de la temporada regular. De hecho, se podría decir que nunca estuvo en la cabeza del entrenador, como en la mayoría de los casos, la de hacerse con este agente libre. Suelen darse casos de contrataciones en estas fechas, pero suelen ser para tapar huecos o pensando en futuros traspasos sobre dicho contrato.
Adiós Vernon Macklin, ¿hola crisis?
“No hay ningún motivo para entrar en pánico”. Estas fueron las palabras de Eric Gordon al portal ‘nola.com’ después de sufrir la segunda derrota consecutiva de esta temporada a manos de Washington Wizards. El equipo, con balance de (1/2), de momento está transmitiendo unas sensaciones un tanto ambiguas dentro de la pista.
Bien es cierto que hay jugadores como Jrue Holiday o Ryan Anderson que llevaban más de medio año sin competir, o como Anthony Davis u Omer Asik, que tras el MundoBasket necesitan un periodo de breve recuperación para sentirse al 100%. Así pues, no se deben disparar las alarmas ni mucho menos. Además, si uno observa la rotación se da cuenta de la gran cantidad de minutos que están teniendo Luke Babbitt o Darius Miller, jugadores que, si todo transcurre con normalidad, caerán a la parte final del banquillo una vez que se recupere Tyereke Evans de su lesión.
Por lo tanto, parece un poco aventurado hablar de “crisis” en estos momentos por dos derrotas, aunque sí es cierto que toda victoria siempre viene bien para subir la moral de un equipo que nunca ha tenido dinámica ganadora, y que por lo tanto no sabe cómo se experimenta esa sensación.
