Lionel Hollins, HC Brooklyn Nets

Así respondió Lionel Hollins tras ser preguntado sobre la utilidad de partidos como el que cerraba la pretemporada ante Boston.

Brooklyn puso en pista ante los Celtics un equipo plagado de jugadores que han tenido, en su mayoría, muy poca participación durante los partidos de pretemporada. Algunas bajas eran por lesión (Garnett, Brown y Lopez) y otras por dar descanso (Williams, Johnson y Kirilenko).

El partido, que debía servir para que los jugadores de final de banquillo se ganaran el derecho de recibir más minutos, acabó convirtiéndose en una posible sentencia para algunos. Karasev y Teague dejaron mucho que desear. Especialmente crítica es la situación del base, que pese a tener contrato garantizado, se está jugando la extensión de su contrato merced a la opción sobre el jugador que poseen los Nets. Si antes parecía complicado, tras esta pretemporada parece imposible que esto suceda.

Karasev es un caso diferente. Pese a no haber rendido a un gran nivel, el cuerpo técnico tiene depositadas grandes esperanzas en él y es más que probable que en su caso sí que se aplique la opción de equipo, asegurándose seguir un año más en Brooklyn.

En el caso de los jugadores con contrato no garantizado, sorprendió (o no) que Jerome Jordan prácticamente no participara en el partido de ayer. Esto, en el caso del pívot, significa que su presencia en la plantilla que disputará la liga regular está más que garantizada. Jordan a rendido a un gran nivel, sorprendiendo a propios y extraños. Cory Jefferson, pese a no haber hecho un gran partido ayer, también parece tener bastante asegurada su inclusión en la plantilla. El jugador sí que ha rendido bien en partidos anteriores y goza del voto de confianza de los técnicos.

La cruz de la moneda se la llevan Jorge Gutierrez y Willie Reed. Ciertamente no han desagradado del todo a los técnicos, pero tampoco han hecho méritos suficientes como para desbancar al resto de jugadores.

Jorge Gutierrez, en los minutos que ha tenido, ha demostrado ser un base más sólido que Teague. Sin embargo, su falta de impacto en los partidos (tanto de la temporada pasada como en esta pretemporada) y, sobretodo, el hecho que cortar a Teague supondría 3 millones extras para Brooklyn, parece condenar al jugador méxicano a abandonar la franquicia en los próximos días.

Willie Reed también ha jugado de una manera correcta, aportando su granito de arena cuando estaba en pista. Sin embargo, el poblado juego interior de Brooklyn y la irrupción de Jerome Jordan, así como el rookie Cory Jefferson, no le van a permitir seguir viviendo su sueño de jugar en la NBA.

El sábado parece la fecha marcada para que todos estos interrogantes tengan respuestas. Ese día parece el más plausible para que Brooklyn anuncie los jugadores que no seguirán. Pero no solo los jugadores con contrato no garantizado deberían estar expectantes. Brooklyn ha demostrado muchas veces en su pasado próximo que, si la ocasión lo requiere, no está limitada por el tema económico y Billy King es perfectamente capaz de hacer los movimientos necesarios para mejorar la plantilla. Teniendo esto en cuenta, no deberíamos descartar la opción de que algo suceda con Marquis Teague.