El nuevo Michael Kidd-Gilchrist

Quiere demostrar porque fue segundo en el draft

Michael Kidd-Gilchrist fue drafteado en 2012 por los antiguos Bobcats en la segunda posición debido a que Michael Jordan vio en él a un líder de un equipo ganador como eran sus Wildcats de Kentucky. Sin embargo, sólo tenía 19 años y le ha costado adaptarse a la mejor liga del mundo. En estas dos primeras temporadas, el de New Jersey sólo ha podido destacar como un pilar importante en el plano defensivo, con un juego ofensivamente pobre. Además, tampoco demostró que tuviera el carácter necesario para liderar un equipo.

Sin embargo, este verano ha trabajado duro para ser el jugador que se esperaba en 2012: para empezar, cambió su mecánica de tiro y ha mejorado notablemente sus porcentajes desde la media distancia y en los tiros en suspensión. Además, parece que ya tiene el coraje suficiente para mandar a sus compañeros, es decir, para ser un líder.

Sobre esto se ha pronunciado su compañero Gerald Henderson, al que le sorprendió que Kidd-Gilchrist le corrigiese la posición en un lance del partido del viernes:

«Yo solía ser el que le decía a él: ¨colócate ahí, estate allá.¨ Pero esto es bueno, cuanto más chicos haya que sepan lo que quiere el entrenador, mejor.»

«Aún es joven, pero ya entiende de qué va el juego y se nota que se siente más cómodo en la cancha.»

 Según Henderson, el alero se está ocupando del rookie P.J. Hairston, y espera que se le contagie su actitud y su forma de jugar. Si estos dos jugadores se compenetran bien, podrían formar un genial dúo, gracias a la defensa de MKG y la capacidad anotadora de Hairston. Es por ello que es ilusionante que el alero comience a sentirse más seguro de sí mismo y contagie su tenacidad y capacidad de liderazgo a todo el grupo para que puedan hacer algo grande en esta campaña que está a punto de comenzar.