A nadie se le escapa que el año de los Milwaukee Bucks está siendo sensacional y que el trabajo de su entrenador Jason Kidd con este grupo de jóvenes es, cuanto menos, prometedor. Pero pese a todo este alarde de buenas noticias, los Bucks parecen estar medio malditos este año, y es que son el equipo con más jugadores lesionados de toda la NBA, y no solo de manera temporal, sino también en forma de bajas para toda la temporada.
Y a tal punto ha llegado la mala suerte en los Bucks que en el partido que les midió a los Raptors se presentaron a jugar con solo siete jugadores, y claro… se llevaron un saco de Canadá.
Entre los lesionados se encuentran dos piezas claves, como son el rookie Jabari Parker y Brandon Knight, el pívot del equipo Zaza Pachulia, el díscolo Larry Sanders, del que no se sabe cuando volverá, el polifacético alero turco Ersan Ilyasova, el mejor pasador del equipo, Kendall Marshall, y el prometedor Damien Inglis.
El caso tanto de Jabari, como de Kendall, como de Inglis no tiene remedio, los tres jugadores han debido pasar por el quirófano y no se les espera de vuelta en lo que resta de temporada. Lo único que pueden hacer ahora es tratar de ser lo máximo competitivos que puedan y buscar, ¿por qué no? una plaza en los playoffs. Ahora mismo marchan sextos en el Este con un balance de 26 victorias y 21 derrotas