Lo que más necesitan los Hawks antes de la fecha límite de traspasos

El rebote, durante toda la temporada, ha sido la mayor debilidad del equipo, ¿hay alguna manera de fortalecerse en este aspecto antes de que acabe el período de traspasos?

Es difícil identificar lo que se puede mejorar en un equipo que va primero en una conferencia con 6,5 partidos de ventaja sobre el segundo. Atlanta tiene que tener cuidado al hacer cualquier movimiento que pueda perturbar la química del equipo.

Atlanta jugando al baloncesto, es excepcional en ambos lados de la cancha, pero el equipo tiene una clara debilidad estadística: los rebotes. ¿Es simplemente una debilidad o es un problema? La cuestión del rebote podría ser simplemente una herida superficial que se ve mal en la línea de estadísticas, pero no tiene un efecto muy grande sobre el resultado de los partidos  (como se indica en los 19 triunfos consecutivos de Atlanta).

Atlanta es el peor equipo en rebotes ofensivos en la NBA (8,3 por partido). Miami Heat fue el peor equipo en el rebote ofensivo en el Este del año pasado (7,6 por partido) y ganaría el título de campeón de la Conferencia Este, mientras que el actual campeón de la NBA, San Antonio Spurs (9.3), terminó sólo por delante de los Lakers en el Oeste. Atlanta sin duda debe mejorar en el rebote ofensivo, pero vistos estos antecedentes, quizás no haría falta.

El traspaso del rookie Adreian Payne, supuso una plaza libre en la plantilla, y si los Hawks quieren intentar mejorar el rebote, tendrían que fichar a un jugador interior como agente libre, como Jermaine O’Neal o Andray Blatche, ya que Amar’e Stoudemire ha firmado con los Mavs, o para suplir a Thabo Sefolosha por su lesión, que podría ser el gran tirador Ray Allen. Parece ser que también se ha mostrado un interés en Gary Neal.

Hay posibles rumores sobre la llegada de Arron Afflalo o Wilson Chanlder, procedentes de los Nuggets, y según Adrian Wojnaroski, los Hawks estarían buscando traspasr a John Jenkins, al que se le podría sumar otro jugador o una ronda.