Incombustible. Esa es la palabra que mejor define al gran capitán del Real Madrid, Felipe Reyes, el ex del Estudiantes está firmando un año sensacional, promediando 11.9 puntos y 5.7 rebotes, además de una valoración media por partido de 15.2 puntos, siendo el mejor nacional de la liga Endesa en este apartado.
Ayer cumplió 35 años, y el Real Madrid piensa hacerle el mejor de los regalos posibles, ofrecerle una renovación que le ate al club de sus amores para lo que resta de vida deportiva.
Lleva desde el verano de 2004 en el conjunto blanco, siguiendo los pasos de su hermano Alfonso, quién también dejó el Ramiro por irse al hermano rico de la ciudad. Desde que llegase, se ha convertido en toda una institución dentro del club de Concha Espina.
No ha parado de ganar títulos, 3 ACB, 4 copas del Rey, 1 copa ULEB, 3 Supercopas de España.. la espina clavada es la Euroleague.
Los blancos y el pivot cordobés tienen más que avanzada su renovación, la complicidad por ambas partes es total, apenas unos flecos referidos a la extensión del contrato separán el «si quiero» final, que posiblemente esperará al inicio de los playoffs para hacerse oficial.
Uno de los puntos que enganchan más a Felipe es la disposición que tiene el Real Madrid de hacer que la vinculación del 9 no acabe con su carrera deportiva, sino que tendrá un puesto en el organigrama de la sección de baloncesto una vez se retire.
