Los Bulls recuperan la tercera plaza del Este a costa de los Heat

El momento de la verdad está cada vez más cerca, y ha llegado el momento de colocarse en la mejor posición posible para afrontar el tramo decisivo de la temporada. Así, los Chicago Bulls y los Miami Heat se enfrentaban ayer en el American Airlines Arena en busca de una mejor posición de cara a los PlayOffs en el Este. De hecho, los Bulls marchaban cuartos empatados por la tercera plaza con los Raptors, y con solo un partido de ventaja sobre el quinto clasificado, los Wizards. Para los Heat la exigencia todavía era mayor; la octava plaza (y también la séptima) estaban a solo un partido de diferencia, por lo que la victoria se antojaba obligada para los chicos de Spoelstra si querían seguir vivos en esa lucha por la clasificación. Derrick Rose volvía a estar presente con 20 minutos limitados y Jimmy Butler se perdía el choque por unos problemas físicos, mientras que en los Heat Wade y Whiteside podían jugar, así que todos los hombres importantes de los locales saltaron a pista sin problema.

El partido empezó con un ritmo realmente frenético y un nombre propio; Pau Gasol entró a pista en modo OnFire y se echó el equipo a la espalda desde el primer minuto (10 puntos y 7 rebotes para el de Sant Boi en esos 12 minutos iniciales). Gracias a él los Bulls consiguieron tomar la iniciativa frente a Dragic, Wade y compañía, que en ataque se mostraban efectivos en los minutos iniciales. Esa iniciativa, sin embargo, no se traducía en ventajas importantes para los hombres de Thibodeau, sino que la igualdad reinó en todo momento y en cuanto los porcentajes bajaron, ninguno de los equipos pudo cometer al otro a su ritmo y estilo, y el marcador del final del primer cuarto fue de 20-18 para los visitantes.

En el inicio del segundo las cosas apenas cambiaron, aunque sí lo hicieron los protagonistas. La entrada de la segunda unidad conllevó que hombres como Nikola Mirotic, «Birdman» Andersen o James Ennis tomaran el relevo. Con el banquillo en pista la defensa de los Heat puso una marcha más y gracias a ello los locales consiguieron tomar ventaja en el marcador por vez primera en el encuentro. Un par de triples consecutivos de Michael Beasley (para un total de 13 puntos en el cuarto) alzaron esa ventaja hasta la docena para los de Spoelstra, momento en el que Thibs tuvo que parar el partido para que no se le fuera de las manos. De nada sirvió, Beasley siguió a lo suyo en un cuarto que tardará en olvidar y la ventaja de los Heat seguía creciendo más y más. Finalmente el luminoso mostraba un 32-51 para los locales en un período en el trabajo defensivo de los Heat, sumado a los errores no forzados de los Bulls, dejaron a estos en un terrible 3/24 en tiros de campo.

Los Bulls sabían todo lo que estaba en juego y no se permitieron seguir con esa mala racha también en la segunda mitad, así que un parcial de salida de 15-2 en los 6 primeros minutos, con Tony Snell primero y Rose después como artilleros dejó la situación igualada de nuevo. De hecho, a falta de 2:30 los Bulls habían conseguido igualar de nuevo la contienda a 57; poco después se pusieron por delante y a partir de entonces la ventaja empezó a crecer en su favor hasta el 65-59 con el que se llegó al final del período. Ahora eran los Heat los que habían cuajado un cuarto para el olvido (su peor de la temporada en anotación), quedaban 12 minutos y todo por decidir. Los Bulls venían en racha, pero los Heat jugaban en  asa y se jugaban la vida en ese cuarto período.

Fueron los de Thibodeau los que salieron a terminar el partido y se marcharon rápidamente por 10 puntos, hecho que obligó a Coach Spo a parar el partido y reestructurar a los suyos. Wade intentó ser el héroe una vez más, pero ayer no fue su día y cuajó uno de los peores partidos del año, y su equipo lo pagó muy caro. El encuentro se estabilizó en la decena de ventaja, pero el tiempo transcurría y los Bulls estaban cada posesión un poco más cerca de la victoria. Ésta finalmente llegó y el marcador final fue de 89-78.

El único que rindió realmente a gran nivel para los locales fue Whiteside, con 19p-16r. Beasley tuvo ese maravilloso segundo cuarto en el que anotó 13p, y ahí se quedó, mientras que Dragic aportó 15p.

Los Bulls jugaron un partido muy coral en el que hasta cinco jugadores llegaron a las dobles figuras en anotación, destacando Gasol con 16p-15r y Gibson con 14p-12r.