Playoffs, previa: Houston Rockets vs Dallas Mavericks
Otra emocionante eliminatoria en la conferencia Oeste
LA ELIMINATORIA
En los Playoffs tendremos duelo texano, finalmente fueron los Rockets los que se hicieron con la segunda plaza del oeste y se enfrentarán a unos Mavericks que llevaban poco más de una semana anclados en la séptima posición de la conferencia esperando rival para la primera ronda. Los Rockets son el equipo que más méritos ha hecho a lo largo de toda la regular season para lograr el segundo puesto en su conferencia, el cuál les da ventaja de campo hasta una hipotética final del Oeste ante los Warriors. Su segunda posición ha estado cimentada en un James Harden superlativo, que ha jugado a nivel MVP durante toda la temporada logrando 27,4 puntos, 5,7 rebotes y 7 asistencias, estadísticas que chocan de frente con aquellos que le tildan de jugador excesivamente egoísta. Dichos números le han valido para mantener a su equipo en la élite de la liga durante toda la temporada a pesar de las lesiones.
La competencia entre los Rockets y los Mavericks ha estado latente desde incluso antes el comienzo de la temporada. Todo comenzó en verano con la adquisición por parte de los Dallas Mavericks de Chandler Parsons, el hasta este verano alero titular de los de Houston. La polémica continuó con el intercambio de palabras de manera pública entre Daryl Morey (GM de Houston Rockets) y Mark Cuban (dueño de los Mavericks), los cuales se acusaban de haber tentado a Dwight Howard y Dirk Nowitzki respectivamente durante el verano. Dicho enfrentamiento por fin tendrá su final con un duelo directo entre ambas franquicias en la primera ronda de los Playoffs, en el que los de Houston parten como claros favoritos tras auparse a la segunda posición del Oeste, contar con la ventaja de campo en la serie y sobre todo haberse impuesto a los Mavs en los duelos directos durante la regular season con un balance de 3-1.
Ambos equipos presentan plantillas muy distintas a las que comenzaron la temporada, aunque la columna vertebral de ambos conjuntos apenas han sufrido modificaciones. Los Rockets se hicieron con los servicios de Josh Smith tras ser despedido por los Detroit Pistons en uno de los movimientos que más revuelo levantó en la liga a pesar de que el tiempo dio la razón a Stan Van Gundy. También adquirieron en traspasos posteriores a un Pablo Prigioni que, a pesar de no contar con minutos a su llegada a Texas la lesión sufrida por Patrick Beverly le ha dado minutos que está sabiendo aprovechar partiendo desde el banquillo. Corey Brewer llegó desde Minnesota para aportar intensidad en defensa y velocidad al contraataque saliendo desde el banquillo.
ASÍ LLEGA DALLAS MAVERICKS
Los Mavericks por su parte salieron reforzados sobre el papel de los cambios que acometió la directiva para tratar de hacer del equipo dirigido por Carlisle un contender, haciéndose con dos veteranos de calidad a los que les ha costado encontrar su rol dentro de los esquemas del equipo. Tanto Rondo como Stoudemire aportarán veteranía de cara a los Playoffs y esperan ayudar a su equipo a plantar cara a unos Rockets que llevan colgado el cartel de favoritos.
Los Mavericks llegan a los Playoffs 2015 llenos de dudas. El equipo ha sido incapaz de mostrar regularidad tanto en su juego como en los resultados, especialmente tras el traspaso a través del cual se adquirió a Rajon Rondo. Se esperaba que el base llegase para dotar de un mayor control del ritmo de juego a unos Mavericks cuyo base titular era hasta el momento Jameer Nelson y que adolecian de calidad en el puesto de floor general. El precio que pagaron por la llegada del base fue muy alto ya que les costó la espina dorsal de su segunda unidad, una segunda unidad que les estaba dando muy buenos resultados.
Más adelante incorporaron al otrora All-Star Amare Stoudemire tras ejecutar los Knicks un buyout sobre el jugador librándose así de su contrato.
El equipo continuó sin encontrar su juego e incluso llegó a coquetear con la posibilidad de quedarse sin postemporada tras una mala racha de resultados. En la recta final de la regular season el equipo pareció encontrar su ritmo; los nuevos comenzaron a aportar con una mayor regularidad y se consiguió lo que el cuerpo técnico buscaba desde el comienzo de la temporada: un juego en ataque basado en lo colectivo, sin ningún jugador que superase los 20 puntos por partido y en el que cualquier jugador pudiera anotar llegado el momento, traducido esto en reducir la previsibilidad del ataque del equipo y en tener distintas opciones en ataque. La otra clave marcada por el cuerpo técnico era imponer un alto ritmo en defensa y proteger el aro. Con esta misión en verano los Mavs se hacían con Tyson Chandler, defensor del año en 2012, el cual tras varios problemas físicos durante la temporada parece llegar en su mejor momento de la temporada para tratar de frenar a Dwight Howard. La batalla bajo los tableros está servida.
ASÍ LLEGAN HOUSTON ROCKETS
Con un gran sprint final, el equipo entrenado por Kevin McHale ha conseguido acabar la temporada como segundo del Oeste, disipando muchas dudas en torno a su juego, y con jugadores al alza, como son el caso de Trevor Ariza o Josh Smith, dos hombres que han dado un paso adelante en el equipo.
Sin embargo, el equipo liderado por James Harden cuenta con dos bajas sensibles, la de Patrick Beverley, y Donatas Motiejunas, a las que hay que sumar la del rookie KJ McDaniels. El base titular y el primer recambio para Howard en la pintura, McHale va a tener que tirar de imaginación si no quiere tener a Dorsey más de lo debido en cancha.
Pero todos los problemas se pueden solucionar gracias a un nombre, James Harden. La barba ha hecho una temporada sensacional, es uno de los favoritos al MVP y está con hambre. Este es su año, anota, rebotea, asiste,.. Además, parece que los servicios médicos del equipo han hecho un gran trabajo con Dwight Howard, la segunda espada de los Rockets, un hombre muy determinante y que tendrá un papel decisivo en el devenir de los de McHale en los playoffs.
Las claves de Houston pasan por controlar el ritmo del partido. Sin Beverley, la dirección de juego la va a llevar Jason Terry, un base-escolta que lleva mucho tiempo sin ejercer de «uno», junto a él, el veterano Pablo Prigioni, un perro viejo que las sabe todas, enfrente Rajon Rondo, venido a menos esta temporada pero del que se espera de un paso adelante en playoffs.
El banquillo es otro punto a tener muy en cuenta, el equipo de McHale cuenta con una buena segunda unidad, si bien las bajas la han debilitado. Brewer y Smith aportan una dosis extra de intensidad en defensa, además de anotación.
Los triples. Houston es el equipo que más tira desde más allá del perímetro de la liga, sus porcentajes no son buenos, pero si consiguen estar finos los Mavs lo van a tener realmente complicado. Además, el de McHale es un equipo tremendamente físico, al que le gusta correr y las transiciones rápidas. Si logran plantarse en 3 pases debajo del aro con facilidad tienen mucho ganado.
Las claves
Opinión y pronóstico
Por Carlos López e Ignacio Ojeda
Eliminatoria muy dispar a priori. Los Rockets llegan como claros favoritos para alzarse con el duelo texano liderados por un Harden superlativo, con ganas de demostrar que no es únicamente un jugador de temporada regular y de hacerse con los galones que le acrediten como una de las superestrellas de la NBA. Harden ha sido capaz de llevar a los Houston Rockets al segundo puesto de una conferencia Oeste de las más duras que se recuerdan, con un récord de 56-26. Enfrente tendrán a unos Mavericks calificados como uno de los equipos más irregulares de la competición, a pesar incluso de haber logrado 50 victorias. Los de Carlisle afrontan el ocaso de sus estrellas basando su juego en el poder del colectivo y se enfrentarán a un equipo joven con estrellas en pleno crecimiento, sin duda una lucha apasionante.
El duelo texano está servido.
Pronóstico SomosBasket: 4-2 para Houston Rockets