El futuro de Andrea Bargnani tiene un precio

Su contrato es el gran problema para los Knicks

Fuente de la foto: Keith Allison (CC)
Fuente de la foto: Keith Allison (CC)

Andrea Bargnani llegó a los Knicks en 2013 procedente de Toronto Raptors y su rendimiento durante estos años en Nueva York ha sido más que cuestionado. Parecía ser otro jugador prescindible en el futuro proyecto de la franquicia. Sin embargo, con su buen nivel mostrado en los últimos meses de temporada regular, parece haberse ganado la continuidad en el equipo. Pero, ¿a qué precio?.

Ha tenido 29 apariciones en el curso 2014/15. Con promedios de 19,7 puntos, 5,8 rebotes y 2,1 asistencias por 36 minutos. Cabe destacar también su 37% en tiros desde la larga distancia. En general, los tiros en suspensión son su pan de cada día (según 82games.com, el 83% de sus intentos totales). Pero el 79% de estos tiros vienen precedidos de asistencias, anotando así en el flujo del ataque con la eficacia adecuada.

En el aspecto colectivo, hay que recalcar su notable adaptación al triángulo ofensivo en comparación al resto de sus compañeros de equipo. Y, a pesar de que la defensa no es ni mucho menos su punto fuerte, la temporada pasada se vieron pequeños signos de mejora en ese aspecto.

Por supuesto, el gran problema actualmente con Bargnani es su contrato. Los 17,25 millones de dólares hacen que los Knicks tengan que renunciar a sus derechos y convertirse así en agente libre sin restricciones. Esto posibilitaría la vuelta de Bargnani a un precio razonable en esta offseason, pero la franquicia tendrá que competir con ofertas de otros equipos.

Suponiendo que los Knicks se hacen con el Pick 2 en el Draft, dispondrían de alrededor de 26 millones de dólares para gastar en la agencia libre. Suena bien, pero podría gastarse rápidamente con dos o tres buenos jugadores y habría que ver cómo encaja ahí Bargnani. La opción más viable pasaría por ofrecerle el contrato mínimo, ya que con uno superior a 2-3 millones de dólares, los planes de los Knicks se verían trastocados.

En una situación similar se encuentra Alexey Shved. Aunque el gran Factor X es José Manuel Calderón. No sería raro que los Knicks se deshicieran de los dos años y 15.100.000 dólares del contrato del base español. Este movimiento dejaría dinero para Bargnani y Shved, además de unos 30 millones de dólares para gastar en la agencia libre.

Definitivamente, Andrea Bargnani tiene el potencial para ser un jugador importante para los Knicks. Bueno para el triángulo ofensivo, sería una gran pieza para la segunda unidad, incluso titular en caso de apuro. Por estas razones, y con un hipotético contrato de un año de 2-3 millones de dólares, valdría la pena apostar por su continuidad en Nueva York.