Los Warriors vuelven a ser los campeones 40 años después

Los Golden State Warriors han conseguido su objetivo de consagrarse campeones de la NBA en la temporada 2014/2015. Una temporada histórica para el conjunto de la bahía, consiguiendo 67 victorias en temporada regular, coronada de la mejor manera posible, ganando la NBA.

40 años desde aquel último anillo ganado contra los Bullets, 40 años que ahora parecen pocos. 40 años de los que nadie en Oakland volverá a hablar. A partir de ahora se hablará de la temporada histórica en el 2015. 105-97 fue el marcador final del sexto partido que cerró la serie final a favor de los Warriors 4-2.

El partido empezó favorable a los locales, cuando en los primeros minutos de tanteo ganaban 2-7, a partir de ahí la maquinaria del equipo de la bahía empezó a funcionar. Con una defensa asfixiante que forzó 5 pérdidas de los Cavs en los primeros 5 minutos y un ataque fluido, los Warriors, liderados por Curry e Iguodala, conseguirían un parcial de 21-8 que les permitiría acabar el primer cuarto por delante (28-15). En el primer cuarto 11 de las 12 canastas anotadas por el equipo californiano fueron asistidas. Pero cuando mejor estaban los Warriors, llegó el final del primer cuarto y con su fin despertó Cleveland.

Los segundos doce minutos empezaron con una falta de Livingston en la línea de triples a Jones, que consiguió anotar los tres tiros libres, algo que espoleó a sus compañeros. Sobretodo al pivot ruso Mozgov, que dio un clinic en defensa consiguiendo 3 tapones en este cuarto. Además los Cavs consiguieron imponer su ritmo, o más bien su falta de ritmo, algo que sumado a los 7 rebotes ofensivos conseguidos les permitió recuperar la ventaja que los Warriors habían conseguido. Al descanso se llegó con un 45-43 en el marcador.

Al volver de los vestuarios la tónica siguió siendo la misma, incluso Cleveland consiguió completar su remontada y ponerse por delante (45-47). Pero cuando parecían más vivos que nunca, la noche volvió a cambiar. Un parcial de 8-0 devolvió la ventaja a los Warriors (47-53). La presión en defensa y el acierto en ataque volvieron cuando más hacia falta. El partido se puso aún peor para los Cavs cuando un invitado completamente inesperado hizo acto de presencia. Festus Ezeli tuvo la noche de su vida y en diez minutos consiguió 10 puntos y 4 rebotes, casi todo ello lo sumó en el tercer cuarto. Dicho cuarto llegó a su final con los Warriors liderando ya por doce puntos: 73-61.

Parecía que con todo resuelto entrábamos en el último cuarto de la temporada, sin embargo el cuarto tuvo mucho más competencia de la que se podría pensar en un principio. Los Cavs lucharon como llevan haciendo toda esta serie, y no se rindieron. Y es que si algo han demostrado estos Cavaliers ha sido pundonor y enfrentándose a un enemigo que no podían vencer, nunca se rindieron. Y eso dio paso a la esperanza en Cleveland, ya que a principios del último cuarto redujeron la ventaja a 7 puntos. Pero de nuevo, los Warriors respondieron en forma de triples, Steph Curry e Iguodala volvieron a poner una losa sobre los Cavs. 89-77 era el marcador a 6 minutos del final. Y aún así los Cavs no se rindieron y lograron ponerse a 4 puntos (97-101) a falta de 29 segundos. Dándonos una lección a todos los que les dábamos por muertos. Pero Curry desde la línea de tiros libres pondría la losa definitiva y enterraría a los Cavs. Finalmente, Andre Iguodala fue nombrado MVP de las finales. Un MVP muy reñido entre él, su comapeñero Stephen Curry y LeBron James, quien ha realizado unas finales que también pasarán a la historia, a pesar de no haberse proclamado campeón.

De esta forma los Golden State Warriors ganarían un título tras 40 años esperando, un título histórico que cierra una temporada magnífica de 83 victorias en 103 partidos. Esperemos que este sea solo el comienzo de un equipo que promete echando la mirada a la temporada que viene.