Nacido el 10 de mayo de 1996, Jones es un base de 1’85 m. de altura y 87 kg. de peso, que posee una envergadura de 1’96 m. Ha estado dos años formándose en su etapa universitaria en Duke, donde ha ganado el campeonato de la NCAA en esta última temporada, y ha promediado 11’8 puntos, 3’5 rebotes y 5’6 asistencias en 33’5 minutos por encuentro.
Análisis anteriores en el Mock de Somosbasket: Karl Towns, Jahlil Okafor, D’Angelo Russell, Emmanuel Mudiay, Justise Winslow, Kristaps Porzingis, Mario Hezonja, Stanley Johnson, Kelly Oubre, Myles Turner, Frank Kaminsky, Willie Cauley-Stein, Bobby Portis, Cameron Payne, Sam Dekker, Robert Upshaw, Trey Lyles, Rondae Hollis-Jefferson, Christian Wood
En cuanto a sus virtudes, destaca por sus grandes aptitudes de base, que es un gran anotador y pasador en pick & roll, y que muestra confianza en sí mismo.
Es un jugador que lleva en la sangre ser base, que es un increíble floor general que dirían en América (general en el parqué), y que posee unas aptitudes de élite en cuanto a visión de juego y creatividad. Ve las jugadas dos segundos antes de que sucedan, juega con la cabeza levantada y sabe engañar a la defensa con solo una mirada. Es un excelente distribuidor, mueve muy bien el balón y sabe hacerlo a la perfección, con unos grandes porcentajes de acierto en los pases; incluso sabe el momento preciso en el que utilizar pases picados o pases sin mirar. Lideró la NCAA en asistencias en transición con 86 durante este último curso, con lo que se ve claro que sabe correr al contraataque, y encontrar a los compañeros mejor posicionados para anotar, siendo muy generoso en ese aspecto, ya que a veces incluso busca al compañero cuando él mismo podría finalizar. Tiene una gran capacidad para encontrar a tiradores desmarcados sin necesidad de penetrar en la defensa, aunque también sabe entrar con fuerza hacia canasta y decidir si finalizar o doblarla a un compañero.
Jones sabe leer muy bien el pick & roll, cuando pasar al hombre grande que continúa o a un tirador desmarcado. Sabe esperar el momento adecuado para dar el pase, sea picado, normal o en alley-oop. Pero no solo es un distribuidor en el bloqueo y continuación, sino que también sabe utilizarlo para anotar, tanto desde media distancia como desde la línea de tres, y se ha visto su progresión durante este último año, mejorando sus porcentajes a 44% en tiros de dos, 37’9% en tiros de tres y 88’9% en tiros libres. Su pull-up tras el bloqueo suele ir dentro si encuentra espacio, además de ejecutarlo con rapidez, y hace que tanto su defensor como el hombre alto en el cambio lo acaben pagando. Además, también sabe cuando utilizar el bloqueo para entrar a canasta, utilizando muy bien los cambios de ritmo para dejar al defensor atrás, tanto si es el base como el pívot. También cabe destacar que se maneja bien a la hora de realizar ‘bombas’, y ha anotado este año 20 de 59, pero deberá mejorarlo un poco de cara a la NBA.
Por último, otro de sus puntos fuertes es su confianza. No le teme a nada, se ha jugado tiros importantes durante todo el año y los ha anotado; sus mejores momentos han sido en el clutch time. Anotó 23 puntos en la final de la NCAA ante Wisconsin con tan solo 18 años y fue nombrado el Jugador más Destacado de la Final Four 2015. Tiene sangre fría, raramente duda de sus posibilidades y se muestra extremadamente tranquilo y sereno con lo que hace. Podemos destacar también que es muy peligroso en el catch-and-shoot, y que en cualquier momento puede anotar el tiro si se encuentra desmarcado.
Pasemos ahora a sus puntos débiles, en los que destacarían su poco físico y su defensa al jugador con balón.
A pesar de sus grandes habilidades, es un jugador con un físico muy pobre para el nivel NBA, sobretodo ante la gran cantidad de bases atléticos y superestrellas que se encuentran en esta época. Debe desarrollar más su cuerpo, ganando peso y músculo, y si además a eso le sumamos que no tiene una gran velocidad y aceleración, y que tampoco es muy explosivo, ante jugadores como por ejemplo Russell Westbrook o Derrick Rose lo va a pasar muy mal. Tendrá que confiar demasiado en su tiro en la NBA. A pesar de ser muy astuto, sufre mucho cerca del aro contra jugadores más altos y atléticos, tanto en defensa como en ataque. Debido a su poco físico, le cuesta mucho salir de los bloqueos y sobrepasar a defensores en ataque.
Otro de sus defectos es su defensa al jugador con balón. Este año ha mejorado en este aspecto pero aun así sigue sufriendo para contener las penetraciones de sus atacantes. Su rapidez lateral no es muy destacada y eso hace que se quede atrapado en los bloqueos a menudo. Mejorando en defensa hará que su valor aumente como base suplente en la NBA, pero hasta entonces su potencial está bastante limitado por su falta de físico. En la defensa de pick & roll, siempre está más pendiente del hombre alto que pone el bloqueo y tiende a despistarse y a no presionar como debería al jugador con balón. Suele caer ante las fintas de sus adversarios, dado que a veces no está en tensión defensiva, y ello hace que pierda la posición y genere una canasta fácil al equipo contrario.
COMPARACIÓN NBA: A Jones se le compara con varios bases. Parece ser que en el mejor de los casos llegará a ser un jugador del estilo de Mike Conley. También se le compara con Trey Burke, aunque aún no ha demostrado todo su potencial en la liga. Finalmente, en el peor de los casos podría ser comparado con Luke Ridnour.
En nuestro mock draft, ponemos a Jones en la posición nº 21 elegido por Dallas Mavericks, aunque otros mocks importantes como NBADraft.net o DraftExpress, lo sitúan en la 18ª elección de los Houston Rockets.