Bradley Beal y los Wizards comienzan a ver más cerca la renovación

Bradley Beal, el cual entra en su cuarta temporada en la NBA, acabando así su contrato de novato, desea la renovación por el máximo con Washington Wizards, y parece que poco a poco ambos empiezan a encontrar la solución al culebrón de este verano. Y es que parece que por los comentarios de unos y otros, dicho «jaleo» tendrá su solución a finales de octubre. Por su parte, Beal se ha estado mostrando, respecto al tema, siempre muy cordial y abierto a la negociación, y aunque no se alcanzara el acuerdo, el escolta pasaría a ser agente libre restringido el próximo verano, teniendo el equipo de la capital derechos de igualar cualquier oferta para retenerlo.

«No estoy nada preocupado por el tema». 

Palabras de Beal respecto a las muchas preguntas que ha tenido a lo largo del verano, y cierto es que un jugador que promedia 15,3 puntos, 3,8 rebotes y 3,1 asistencias por partido, no debe estar muy preocupado por alcanzar el contrato deseado.

Para tranquilizar a los aficionados comentó:

«No va a cambiar mi mentalidad, no voy a estar enfadado sobre la pista, mientras lleve esta camiseta pondré el corazón por todos cada noche. Tengo confianza, es solo cuestión de que lo hagan, y tanto si lo hacen, como no, estará bien de cualquier manera. Todavía tengo esta temporada por delante, y es lo único que me preocupa».

Una de las claves para Beal, sería poder acabar una temporada sin lesiones, ya que en sus cuatro años como profesional, nunca ha podido completar los 82 partidos de temporada regular. Recordemos que el año pasado se fracturó la muñeca, imposibilitando la aparición del escolta en el inicio de la temporada regular. Teniendo incluso algún que otro contratiempo, como la lesión en su pierna derecha por estrés recurrente, añadiéndole también las más que comunes en él, las torceduras de tobillos.

«Ese es definitivamente mi objetivo. Este verano me he sentido bastante saludable, toquemos madera».

Beal, que mostró un alto nivel en post temporda, llegando a promediar 23,4 puntos, 5,5 rebotes y 4,6 asistencia, liderando al equipo en puntuación los 10 primeros choques, llegando por segundo año consecutivo a semifinales de conferencia, y quien sabe si no podían haber llegado mas lejos sin la lesión de Wall. A diferencia de otros años, y con la baja del base, Bradley tomó las riendas repartiendo mucho más juego, sin bajar en puntuación e incluso llegando a secar a Kyle Korver, que es lo que espera el equipo si de verdad quiere la renovación por el máximo.