Primer partido de Club Ourense Baloncesto de vuelta a la LEB ORO, tras el verano más largo de su historia. Con la vuelta a la competición llega la cruel realidad, el verano fue de despachos, de intentar ser ACB, de no conseguirlo este sino el que viene, y por desgracia, de confeccionar una plantilla a última hora. Dicha plantilla solo tiene 15 días de entrenamiento, alguno de sus jugadores ni eso, y esto es lo que se vio en un Pazo Paco Paz, que tuvo que ver como el todopoderoso Melilla pasaría por encima de los suyos, sin apenas despeinarse.
El partido sirvió para homenajear a los que están, y a los que se han ido, en el campo coincidían tres de los jugadores más importantes del ascenso deportivo a ACB, Pedro Rivero – Guillermo Rejon – Marcos Suka, este último ahora en Melilla, y afición y club se lo agradecieron con eternas ovaciones y placas varias.
Centrándonos puramente en el partido, nos encontrábamos ante un equipo sin hacer, el COB, contra uno de los grandes favoritos para el ascenso a ACB, Club Melilla Baloncesto, y pese a que la grada del Pazo Paco Paz empujó, no fue suficiente para evitar lo inevitable, una exhibición de un equipo que a día de hoy esta a años luz de este Club Ourense Baloncesto.
Los primeros compases del encuentro costosamente fueron igualados, Melilla tiró de bloque donde Pablo Almazán, Hernández Sonseca y Brandon Edwards demostraban su superioridad, y donde un solitario Pedro Rivero tiraba de casta para anotar los primeros 11 puntos de su equipo. La igualdad solo fue una ensoñación, ya que un solo jugador es imposible que pare a un equipo, y tal fue la soledad de Rivero en el arranque, que otro jugador del COB no anotaría hasta el minuto 9 del encuentro, de locos. Melilla dominaba, tiraba de bloque, tampoco sin mucho empuje, tampoco lo necesitaba, y la inercia de los dos conjuntos daba el resultado y las diferencias. Al final del primer cuarto, Melilla ya se imponía por +6.
En el segundo cuarto llegarían las notaciones, y con ellas mayores diferencias. Marcos Suka demostraba ser el hombre importante en la segunda unidad de Melilla, algo que por el momento no pudo demostrar en el COB, Diego Kapelan, en teoría el fichaje anotador de los de Ourense que ayer tuvo una noche para olvidar.
En este cuarto, pudimos ver a un jugador que quería demostrar su calidad, Kapelan, pero también vimos quien lo ha sido todo en el Pazo, y ya no está, los dos, cara a cara, frente a frente, esta noche ganó Suka, tanto ofensiva como defensivamente, y ganó con claridad.
Como decía, la segunda unidad siguió marcando las diferencias hacia Melilla, con una sola buena noticia local, la aparición de Jhornan Zamora, el Venezolano, demostró, que pese a no estar en forma, aun, tiene calidad de sobra para dar noches de buen juego a Ourense. Acompañándole, Guillermo Rejón, que fue el mejor del COB, por regularidad y garra, en los instantes donde el partido se decidía entre una victoria sin mas, o una sonora paliza visitante.
Al descanso, Melilla ya dominaba por +10, pero lo peor estaba por venir. Con un Club Ourense Baloncesto sin química en su juego, con jugadores jóvenes, y muy prometedores, en su primer partido juntos, y algunos en esta categoría, y ante un equipo creado para ganar, entraba en la lógica mas aplastante que el partido acabase siendo una pachanga, como así fue.
Con Rivero y Rejón fuera por físico y mentalmente, no en el partido, todo fue mas fácil para Melilla. El gran bloque multiplicaba sus efectivos, y el tercer cuarto fue el de las mayores diferencias en el partido. Así pudimos ver, mas y mejor de los Hernandez Sonseca, de Marcos Suka, de Edwards, de Almazan, pero también de Asier Zengotitabengoa que demostró su buena mano, un jugador muy productivo para este equipo.
Delante ya no quedaba nada o casi nada, sin los viejos rockeros del COB, las diferencias fueron abusivas al termino del tercer cuarto, donde Melilla llegó con los deberes hechos, y con diferencias de +32. Demasiado castigo para un equipo y una afición ACB, en su año de transición.
El último cuarto fue el único que gano el Club Ourense Baloncesto, aunque no valiese de nada, y donde se volvió a ver la calidad de Jhornan Zamora, mucho mas suelto que en el resto del partido. Todo lo bueno del COB salió de su producción, algunos tiros asombrosos, buenos pases a sus compañeros, y un espíritu ganador, pese a la paliza a la que Melilla los estaba sometiendo. Su mejor aliado, en esta corta remontada, sería Ander Martínez, el canterano cedido por Estudiantes a Ourense, que dio buenos minutos finales.
Al final del partido, Melilla se fue con la victoria, un +20 que pudo ser mucho peor, pero ni la ocasión lo merecía ni ellos quisieron mas. Marcos Suka se convertiría en el hombre del partido, su vuelta al Pazo fue dulce, donde ya es una leyenda, produciendo para los suyos 17 pts 5 rbts 2 asts 1 robo. El jugador mas desequilibrante, fue Hernández Sonseca, 19 pts 4 rbts 3 robos, y la sensación de superioridad que solo él da en esta liga.
Hablando en clave COB, mucho por hacer, los de Ourense están en su pretemporada, y esa es la buena y la mala noticia a la vez. La mala es que los malos resultados no tardarán en llegar, porque esta plantilla no está rodada, no hay baloncesto compartido entre sus jugadores, toca trabajar muy duro para que esto cambie. La buena que lo visto ayer, será la peor cara que se vea de esta plantilla en esta temporada, toca mejorar, hay mimbres para ello.