Ronnie Price acepta su rol de veterano en los Phoenix Suns
Contará más su experiencia que sus minutos en pista
Eficiente, agresivo y con carácter. Así es Ronnie Price, el tercer base de los Phoenix Suns y que se adapta perfectamente al rol que busca Jeff Hornacek en su último base. La última experiencia de usar a tres bases de calibre, como Bledsoe, Dragic y Thomas, no funcionó muy bien y es por esto que se prefiere un base de otro estilo.
Price ya jugó en los Suns, aunque en esa ocasión era con contrato no garantizado y ahora ha firmado 1.5 millones como un base fiable en la competición. Además coincidió ya en ese momento con Markieff Morris, que era rookie por aquella 2011/2012. Jeff Hornacek fue entrenador asistente en los Jazz cuando Price jugaba en Salt Lake City y Earl Watson, ex-compañero suyo, ahora es asistente en los Suns.
Fiable, económico y en un ambiente que ya conoce. Sólo faltaba que el veterano point-guard aceptase de buen grado su rol, y así lo ha hecho. Hornacek quiere que Price sea un jugador de rol a tiempo parcial, podría decirse, el tercer base por detrás de Bledsoe y Knight cuya mayor aportación debe ser la experiencia de 10 años en la NBA.
Con 32 años y después de hacer la mejor temporada de su carrera con Los Angeles Lakers, Price llega en el momento ideal para ser el veterano entre los bases. Además no se puede pasar por alto que siempre cumple cuando está en la pista.
«Encaja perfectamente conmigo,» dice Price sobre su rol
De momento ha hecho buenos encuentros en pretemporada. Suma 16 puntos, 6 asistencias y 5 rebotes en 42 minutos, haciendo jugar bien a sus compañeros y siendo tenaz en el apartado defensivo.
«Ha estado muy bien,» dice Hornacek. «Su actividad y la manera en la que presiona va a ser importante para nosotros. Ojalá no tengamos complicaciones, pero cuando la segunda unidad salga, tendremos ahí un base para subir el balón en los momentos difíciles.»
Cabe recordar que en febrero fue operado de un hombro y sus sensaciones desde entonces dice ser mejores que nunca. Según dice el propio Price, ha recuperado la confianza que tenía en high school, universidad y en los primeros años de carrera NBA.
También destaca que su adaptación a estos Suns ha sido muy fácil por las caras conocidas y por un ambiente familiar que conocía de primera mano. Algo que Price ha resaltado es el poder compartir vestuario con Bledsoe y Knight, dos de los mejores bases jóvenes de la competición.
«No necesitan aprender nada de mí,» dice Price. «Estoy aquí para ser un hermano y compañero, ayudarles en la temporada con una mentalidad muy clara. Estos chicos están dotados de baloncesto. No siempre se tiene la ocasión de competir contra dos bases de calibre All-Star en los entrenamientos. Es una alegría. Siento un nuevo respeto por Bled y B-Knight. No se conoce el talento que la gente tiene hasta que juegas contra ellos todos los días. Ahora respeto su juego mucho más y estoy feliz de que estén en mi equipo.»