Los Pelicans ganaron gracias a un gran tercer cuarto

Ayer se enfrentaban en Nueva Orleans dos equipos que hasta ahora no han mostrado lo que se esperaba de ellos antes de comenzar la temporada, pero que en las últimas semanas la mejoría de ambas franquicias estaba siendo notable, por lo que llegaban a este partido con ganas de mantener esa inercia positiva.

En los primeros dos cuartos, se pudo ver un choque muy intenso en el que ambos equipos intercambiaron canastas constantemente y donde la igualdad fue la nota predominante, sobre todo en la pintura, gracias al duelo que protagonizaron Anthony Davis y Greg Monroe, que en la primera parte se decantó claramente del lado del jugador de los Bucks (16 puntos al descanso) pero que en la segunda solo tuvo un protagonista, The Brown, que terminaría con 22 puntos, 7 rebotes y 5 asistencias.

Durante estos primeros compases del partido, también pudimos ver a un Jabari Parker mucho mejor físicamente, que a pesar de terminar con diez puntos, realizo varias jugadas de mérito, donde se pudo comprobar que su lesión de rodilla cada vez parece más olvidada y que a cada partido que pasa las sensaciones van mejorando. El primer tiempo terminaría con un gran mate de Ryan Anderson sobre la bocina, y con el marcador reflejando el 52-51 a favor de los Pels.

Sin embargo, en el tercer cuarto todo cambio, y gracias a la aportación de Ryan Anderson y de un imperial Anthony Davis, los Pelicans conseguían hacerse con las primeras grandes ventajas del partido, llegando diez arriba a (84-74) a falta del último cuarto. En este periodo final, se repitió la historia del tercero, y con un parcial de 10-4 en los primeros minutos de este último cuarto el partido quedo definitivamente sentenciado, e incluso hubo minutos (los de la basura) para que los menos habituales pudiesen disputar el encuentro. Al final, 116-99 para unos Pelicans, que logran su quinta victoria en seis partidos y en donde Anthony Davis y Ryan Anderson destacaron por encima del resto, con 22 y 23 puntos respectivamente