El resurgir de Chris Andersen en los Memphis Grizzlies
El pívot de se ha ganado un nuevo apodo
Con 37 años, uno de los jugadores más espectaculares de la NBA por sus tatuajes multicolor, su barba, sus peinados extravagantes y, sobre todo, por sus mates y tapones, Chris Andersen “Birdman”, se ha abierto un hueco en el corazón de los aficionados de uno de los equipos más aguerridos y peleones de toda la NBA, precisamente por su entrega en la pista.
Este buen juego y la conexión con la grada del FeedEx Forum le ha hecho merecedor de un nuevo apodo: “Grizzzilla”, mezcla del monstruo Godzilla y la forma coloquial de conocer a los Memphis Grizzlies, Grizz. Pero no sólo el mote ha sido modificado, sino también sus medidas en SB Nation, “Grizzzilla” mide ahora 4,25 m de altura (14 pies) y 136 kilos de peso (300 libras).
Más allá de cambios en el mote y su apariencia física, Chris Andersen está aportando buenos minutos en la cancha (16,9 minutos por partido) en la posición de pívot, la más castigada por las lesiones en el conjunto dirigido por David Joerger, con Marc Gasol y Brandon Wright fuera por lesión, quedando Ryan Hollins y él como los dos únicos pivots puros de la plantilla, aportando 4 puntos, 4,7 rebotes, 0,7 tapones y casi un 75% de acierto en tiros de dos puntos.