Los Denver Nuggets siguen soñando con los Playoffs

Que levante las manos quien habría creído que los Denver Nuggets pudieran tener una racha positiva sin su máximo anotador en la cancha. Yo no, honestamente, pese a ser una persona extremadamente optimista, no pensaba que los jóvenes Nuggets, sin Danilo Gallinari a disposición por la lesión al tobillo (que se va curando más rápido de lo esperado), habrían sido capaces de sacar todos y cada uno de ellos armas secretas escondidas dentro de sí mismos: orgullo, confianza, ganas, acierto, fantasía, esfuerzo, contundencia, energía. Estoy más que contenta de que el equipo me haya retratado.

Dejamos hablar a las estadísticas: en los últimos seis partidos los Nuggets han promediado 112.5 puntos por partido con un 47.1% de acierto en el tiro (36% en triples). Comparando estos datos con los de la temporada entera, se trata de una clara progresión, estando el equipo en 101.9 puntos con 44% de acierto de promedio (33.7% en triple).

¿A qué se debe este mejoramiento? Así opina Michael Malone:

“En los últimos cuartos hemos aprendido a valorar las posesiones y hacer circular el balón. Creo que estamos haciendo un buen trabajo y jugando con buen ritmo. Otra cosa que me gusta es que estamos conquistando muchos puntos en la pintura”.

“A lo largo de la temporada no hemos sido un equipo muy ofensivo, muy tirador, nos ha costado un poco encontrar la canasta. Pero no nos hemos conformado, hemos seguido trabajando para acercarnos al aro, llegar a la línea de los tiros libres, y haciendo circular la pelota hasta encontrar el mejor tiro. Y creo que lo estamos haciendo muy bien últimamente”.

Y todo esto sin Danilo Gallinari…

“Si nos fijamos en nuestros números ofensivos de los últimos partidos me gustaría preguntar: ¿quién se habría imaginado poder llegar a estos registros sin Gallo en campo? Y esto dice mucho acerca de nuestras ganas, nuestro ataque, nuestra defensa y nuestra valoración de cada posesión. Tenemos que seguir haciendo esto sin que haga diferencia dónde estemos jugando o quién esté jugando”.

Los jugadores que más han visto crecer su anotación en estos últimos encuentros han sido el base Emmanuel Mudiay y el escolta Gary Harris, máximos anotadores en esta racha de partidos.

Mudiay está promediando 19.3 puntos con 44.8% de acierto; Harris está a 16.2 puntos en los últimos 6 encuentros, anotando con el 50.7% de acierto (34.4% en triples). Añadimos a la lista también Nikola Jokić, que parece haber cogido gusto a los dobles-dobles (15 puntos y 9.2 rebotes de media en estos 6 partidos).

Gary Harris analizó así el momento del equipo:

“Creo que estamos haciendo circular muy bien el balón, defendiendo bien y saliendo en transición, consiguiendo muchas canastas fáciles”.

El escolta de Indiana opina que la mejora gradual de los Nuggets está en el orden natural de las cosas, ya que el grupo está cogiendo experiencia y confianza:

“Se trata de progresar, sentirse más cómodos y ganar en confianza y seguridad en uno mismo. Es la sensación que transmite todo el equipo ahora mismo”.

Con 17 partidos aún por jugar y la octava plaza a 6 victorias de distancia, Emmanuel Mudiay no tira la toalla y sigue pensando que aún hay posibilidades de alcanzar la post-season:

“No renuncio todavía a la idea de que podemos clasificarnos para los playoffs. Todo puede pasar, todo es posible”.

Los Nuggets tienen ahora mismo un récord de 27-38 y Rockets y Mavericks, que están empatados en 7ª/8ª plaza están ambos con 33-32; en medio siguen los Jazz, con 30-35.

Aunque el optimismo de Mudiay parece utópico, el base congoleño está ayudando mucho a su equipo a seguir soñando y mirando hacia adelante:

“Como equipo estamos creando las mejores perspectivas para plantear la próxima temporada. Si seguimos este rumbo, creo que el año que viene vamos a poder quitarnos muchas satisfacciones”.

Sin Gallinari, Mudiay se ha convertido en la primera opción de tiro en los momentos candentes de los encuentros:

“Estoy intentando mantener esta confianza. Mis compañeros de equipo confían en mí, entonces intento repagarlos”.

El mismo Gallinari, durante la entrevista que le hicimos la semana pasada, hablando de su lesión, nos comentó que él personalmente creía que “todo pasa por un motivo”; quizás el motivo fuera este: que su equipo hiciese un paso al frente, que algunos jugadores demostrasen ser los compañeros ideales que el alero italiano espera tener para realizar su sueño de traer el anillo a Denver.

El jugador transalpino se está recuperando más rápidamente de lo previsto y en una semana o diez días deberíamos de volver a verlo en campo. Con residuales esperanzas o menos de Playoffs, será de todas formas interesante ver, durante las últimas semanas de competición, qué pueden hacer los jóvenes crecidos Nuggets junto con un Gallo que nos ha acostumbrado a volver muy en forma tras las lesiones. Se prospecta un final de temporada muy divertido en Denver.