Primera ronda Este, previa: Charlotte Hornets VS Miami Heat

Ambos llegan con el mismo récord a la eliminatoria

Fuentes: Scott Ripley - sripley.ripley@gmail.com & Keith Allison (CC)
Fuentes: Scott Ripley - sripley.ripley@gmail.com & Keith Allison (CC)
Fuentes: Scott Ripley – sripley.ripley@gmail.com & Keith Allison (CC)

ANÁLISIS

Llegan dos equipos muy parejos, tanto en récord como en enfrentamientos directos esta temporada, en la que ambos se llevaron 2 victorias ante el otro, lo que nos deja con una gran eliminatoria, donde los Heat esperan poder tener a Chris Bosh de vuelta tras sus problemas médicos; aunque no se ha anunciado nada al respecto y es muy posible que no vuelva en todo lo que le reste al equipo de Erik Spoelstra.

Analizando ambos equipos, se puede ver la gran profundidad de banquillo de los Heat tras la firma de Dorell Wright, campeón con la franquicia de Florida en 2006, si lo añadimos al ya potente banquillos de Miami, puede ser el punto que decante la balanza a favor de los de Wade y compañía. Si la vuelta de Bosh se volviera una realidad, esto haría una eliminatoria mucho más favorable para los de Spoelstra, que dejarían sin reacción a los avispones.

Por parte de Charlotte, el equipo se ha mostrado muy solido en el tramo final de la temporada, ante las dudas de los primeros meses. Con el gran nivel de Kemba Walker y Nico Batum, estos podrían hacer temblar el AAA, dar un susto y quien sabe si la campanada en la eliminatoria. También dependerá del banquillo, ya que, como hemos dicho antes, está en clara inferioridad ante el de los Heat, por lo que los dos Jeremy’s (Lamb y Lin) deberán dar un paso adelante junto con el rookie Frank Kaminsky para llevarse la eliminatoria.

CÓMO LLEGAN

Charlotte Hornets

Los Hornets, tras varios años en el dique seco, por fin han conseguido pasar a los Playoffs de la NBA. Aunque fueron un equipo bastante irregular durante el principio de la temporada, la verdad es que la segunda parte de temporada del equipo ha sido realmente increíble. Con un Kemba Walker estelar, acompañado de figuras como Marvin Williams, la grata sorpresa de la temporada, Al Jefferson, que ha sabido aceptar su rol de banquillo, y Nicolas Batum, la segunda espada del equipo ofensivamente, han conseguido ser uno de los equipos más difíciles de ganar este año.

Los de Steve Clifford llegan como 6º en la clasificación en un Este mucho más exigente que las temporadas pasadas, es decir, que no han sido un equipo clasificado en el game 82 con suerte precisamente. Se enfrentarán a unos Heat, 3º en esa misma Conferencia y empatados con los Hornets, casualmente, a que hubo un quadrúple empate de balances y solo el desempate de enfrentamientos directos pudo reorganizar la clasificación. Los Charlotte Hornets tienen opciones reales de pasar, pero todo pasa por hacer muy bien las cosas, sobre todo en su casa.

Miami Heat

Miami Heat llega a esta eliminatoria en un gran estado de forma; con Whiteside, Joe Johnson o Goran Dragić a gran nivel y un banquillo liderado por dos rookies que cuentan con pleno apoyo de Erik Spoelstra. Solo D-Wade, con molestias físicas recientemente, llega con algo de incógnita al enfrentamiento; aunque no hace falta decir que lo dará todo, como siempre, por los Heat en PlayOffs.

De hecho, la lucha encarnizada que han vivido en las últimas fechas con los mismos Hornets, Celtics y Hawks les ha hecho crecer y evolucionar en su juego, mucho más rápido y dinámico ahora que antes del parón del All-Star. Por tanto, los Hornets deberán vigilar las pérdidas de balón y las transiciones defensivas para que el esloveno, Josh Richardson o Gerald Green entre otros no les cojan la espalda con frecuencia.

Erik Spoelstra sabe muy bien de qué va esto de los PlayOffs, con 4 finales y 2 títulos en su bolsillo, mientras que Steve Clifford aún no ha logrado una sola victoria en postemporada. Es por eso que la confianza en el entrenador de los Heat es máxima; sabe qué hace, cuándo debe hacerlo y cómo; además de haber cuajado una buena temporada regular de nuevo (48-34) pese a la nueva lesión de Chris Bosh, el co-jugador franquicia.

El único punto débil puede ser el ligero favoritismo con el que se llega a la eliminatoria, ya que podría despistar o confiar a los de South Beach y hacerles tropezar en los primeros encuentros en el American Airlines Arena, hecho que complicaría sobremanera la eliminatoria.

LAS 3 CLAVES

Las actuaciones de Kemba Walker y Nico Batum:

  • Los dos jugadores más en forma de los actuales Hornets, que si mantienen el nível causarán muchos quebraderos de cabeza a los Heat, ya que Kemba está a un mejor nivel que Dragić; mientras que por parte de Batum los de Miami deberán recurrir a Winslow para defenderle, pero el rookie no tiene experiencia en Playoffs, lo que podría ser un problema.

El papel de las segundas unidades:

  • Con todos los fichajes de los Heat este año, han conseguido consolidar un gran banquillo con jugadores como Green, Stoudemire, Johnson y si ya sumado a esto añadimos la explosión de los dos rookies, dejan a los Heat con una posición muy favorable, con la única pega de no contar con un base suplente de calidad. El banquillo de los Hornets, en cambio, es uno mucho más flojo, dónde sus únicos referentes de calidad son Lin y Lamb, ya que el rookie Kaminsky no ha explotado como se esperaba.

El poderío interior de Hassan Whiteside:

  • La piedra angular defensiva de los Heat, quien ha pasado de ser un don nadie a causar terror en los rivales cuando están en la zona. El pívot puede ser la criptonita de estos Hornets, ya que ningún interior del equipo es capaz de defenderle y ofensivamente solo Big Al es capaz de hacer algo contra él, por lo que Charlotte debe pensar una estrategia para detenerlo.

PRONÓSTICO

Tras analizar los distintos puntos a favor y en contra de ambos, la redacción de BuzzTheBuzzer opinamos que será una eliminatoria muy reñida, que se decidirá por 4-3 a favor de los Heat. La redacción de MiamiWhiteFire también cree que este no será el único escollo a superar de los de Florida en la postemporada, llevándose la eliminatoria por 4-2.

Previa realizada por: Adrián Bouzas y Alex Güell