El vestuario de los Sixers, una incógnita
Nadie tiene asegurado al 100% la continuidad
Cuando Bryan Colangelo llegó a los Sixers prometió dos cosas: un cambio de rumbo total de la franquicia en todos los niveles y sobretodo, crear un equipo destinado a pelear por el anillo. En estos tres años de ‘The Process’ hemos visto que año tras año la plantilla era objeto de múltiples movimientos, entre cortes y traspasos que han afectado a la moral y ha la química de una plantilla que parecía más a una pasarela de moda que una plantilla de NBA.
Este año no va a ser diferente, Colangelo sabe que este verano debe hacer movimientos urgentes si quiere mejorar de manera drástica el nivel del roster y los jugadores han aceptado cómo natural este proceso de selección, pues, nadie tiene asegurado al 100% su continuidad. El primero en referirse a este hecho plenamente conocido para los jugadores ha sido una de las voces más autorizadas del vestuario sixer, Nerlens Noel, que definía la situación de la siguiente forma.
«Es una situación muy difícil, cuando tu estas toda la temporada viajando y jugando partidos y sabes que puede que la taquilla que tu estés utilizando, al final del año ya no té pertenezca.”
Al contrario de otras franquicias de la NBA que ya tienen una base establecida, los Sixers son un lienzo en blanco, en un verano cómo hemos dicho, decisivo. Decisivo porqué después de tres largos años de penurias el equipo debe y sé espera que empiece a competir y ganar partidos de forma regular, después de firmar unas paupérrimas 47 victorias en tres temporadas regulares.
Con esta idea en la cabeza, la plantilla debe ser remodelada. Todos conocemos el modelo implantado por Sam Hinkie desde el inicio de «The Process«,un roster que se había construido entorno a jugadores jóvenes y inexpertos, que en la mayoría de casos no poseían un nivel «NBA». Bryan lo dejo bien claro, ese modelo ya no sirve para estas alturas de reconstrucción y lo dejo muy claro con las siguientes declaraciones, posteriormente de ser presentado cómo nuevo GM.
“Tu no sólo puedes tener tantos jugadores creciendo en tu plantilla durante este tiempo»
Sentenciando con una frase directa y lapidaria.
«Este va a ser un verano de cambio.»
Después de firmar un 10-72, la segunda peor marca de la historia de la franquicia y de la NBA, uno sólo puede pensar que toca empezar un periodo de transición de plantilla perdedora a plantilla ganadora. Brett Brown, también nos regalo su visión de la situación en la última rueda de prensa de la temporada en la ciudad de los vientos, Chicago.
«Es la supervivencia del más fuerte. Algunos vienen aquí con el conocimiento y el dolor de que algún día alguien vendrá y les dirá que tienen que ir a buscar un nuevo hogar, ya que la casa que tenían a incluido a nuevos jugadores y tú no eres parte de ese futuro. Eso es una de las situaciones que rodean el deporte profesional y esos jugadores lo saben perfectamente.»
«Después de a haber dicho esto, tu tienes que estar cerca de los chicos y, cómo he dicho, este es un equipo que no ha ganado mucho pero, he de decir que he disfrutado de su compañía. Yo he disfrutado entrenando a estos jugadores.”
Dejando a un lado las declaraciones de los protagonistas por el momento, debemos poner sobre las mesas las condiciones iniciales de las que partimos para realizar este siguiente paso del proceso de reconstrucción. Empezando por el gran margen salarial (de los más elevados de la liga, si no el que más) para captar nuevos agentes libres, cómo dejamos claro en un análisis anterior a esta noticia a cargo de Dani Vallejo. En segunda instancia contamos con una gran cantidad de picks acumulados por Sam Hinkie y que deberíamos dar utilidad en materia de elecciones o cómo complemento a futuros traspasos (este año contamos con cuatro elecciones potenciales de primera ronda). Sabiendo que contamos con un 25 por ciento de posibilidades de conseguir la elección número 1 del próximo draft.
Posibles despedidas en los Sixers
Para ir finalizando me gustaría incluir la opinión de dos jugadores que por una razón o otra están involucrados en rumores de traspaso o de finalizar su estancia en la franquicia hablamos de Isaiah Cannan y Robert Covington. Empecemos pues por Cannan.
“Cómo jugadores, nosotros solo podemos controlar lo que podemos controlar, y lo que podemos controlar está dentro de la pista. Todo lo demás, estoy seguro que el entrenador y el director de operaciones están pensando en la mejor forma de hacer que este equipo llegue a tener la mejor posición posible para triunfar. Esta claro que todos queremos formar parte de ese futuro de éxitos, pero también es verdad que esto también es un negocio y puede que no té permitan llegar a vivirlo. Pero al mismo tiempo, nosotros estamos haciendo lo que nos piden, y dejamos todo lo demás, si no todo se desmoronaría.»
En cuanto a Covington.
«Somos cómo hermanos.«
«Nos visitamos los unos con los otros. No es como si todo fuera para nosotros el fin de todo, somos tan cercanos porqué somos un equipo. Estoy completamente seguro que no importa lo que pase, todos seguiremos en contacto entre nosotros.»