Tim Duncan se fue dejando en San Antonio un hueco extremadamente difícil de llenar y una montaña de éxitos que tendrá que sobrepasar ahora el resto de la plantilla.Aunque ya no forma parte del equipo, parece que Tim no ha querido desentenderse del todo de su antiguo grupo, ya que se le ha podido ver alguna que otra vez por los entrenamientos de los Spurs durante este mes de preparación. Su ex entrenador Gregg Popovich se ha mostrado agradecido por estas visitas:
«No le estamos contratando como segundo entrenador ni nada de eso. Simplemente nos gusta su presencia. Él siempre sera bienvenido«.
Ahora bien, parece que esta sombra que deja el histórico jugador de San Antonio recae directamente sobre su sustituto natural en la pista, Pau Gasol. El español ha expresado que encara este inicio de temporada sin el recuerdo de Duncan pesando sombre sus hombros:
«No tengo esa presión. Las cosas cambian y cada persona es diferente. Tengo que ser honesto conmigo mismo y dar lo mejor de mi, y eso es lo que voy a intentar hacer».
No solo Popovich tenía guardadas buenas palabras sobre Timmy, Pau también ha mostrado su admiración hacia la leyenda de la franquicia de Texas:
«Me habría gustado tener la ocasión de jugar con Tim y tenerle en los entrenamientos, porque estoy seguro de que incluso en este punto de mi carrera habría aprendido mucho de él. Habría sido divertido».
Pese a no tener presión, Pau se muestra un poco desconcertado en este inicio de temporada, al no saber a ciencia cierta cual será su rol dentro de los planes de Popovich. De momento, en esta pretemporada solo ha jugado unos 20 minutos de media, poco tiempo para un jugador como Gasol, aunque también es cierto que la pretemporada es algo muy distinto a la temporada regular. Así ha expresado el mismo este sentimiento de incertidumbre:
«Está siendo diferente. Siempre veo las situaciones con la mente abierta, preparado para disfrutar y dar lo mejor de mi. Pero es distinto. Como si siempre hubiera cambios inesperados».
Lo que si está claro es que, al menos sobre el papel, el mayor de los Gasol viene para mejorar los números de Tim Duncan, que promedió la temporada pasada 8.6 puntos y 7.3 rebotes por partido. Los números de Pau son bastante mejores, 16.5 puntos y 11 rebotes por partido, estadísticas de doble-doble. (Además de su sexta aparición en un All-Star.)
En definitiva, el hueco que tiene que llenar Pau no se llena con números ni estadísticas. Se trata de algo que va más allá de todo eso. De una leyenda que se va para siempre y que deja tras de si un legado de buenos recuerdos en las memorias de los fans de San Antonio. Pese a todo esto el pívot barcelonés afronta esta temporada con ilusión y ganas de aportar su máximo.
