J.J. Redick agradece lo que aprendió de Stan Van Gundy
Fue su entrenador durante su etapa en Orlando Magic
En este momento, tras los primeros 7 partidos de la temporada, Los Angeles Clippers se sitúan en el primer puesto de la NBA de menos puntos permitidos por partido (90’7), segundos en porcentaje de acierto permitido (40’7%) y segundos en robos por encuentro (10’7).
Para lograr formar el mejor equipo defensivo de la liga no basta con tener un solo jugador que podría ser perfectamente el jugador defensivo del año, como es en este caso DeAndre Jordan. Para ello se necesita ayuda y confianza en los otros cuatro jugadores que están en la cancha, quiénes deben estar dispuestos a entender de manera perfecta el juego de sus rivales.
Con DeAndre Jordan, Luc Mbah a Moute y Chris Paul como principales estandartes defensivos, el equipo aún necesitaba algo más para dar el siguiente paso, y la mejoría de Blake Griffin y J.J. Redick en este aspecto se ha notado mucho en este comienzo de la temporada, algo que llega al equipo angelino como agua de mayo.
El escolta quiso agradecer a Stan Van Gundy, su primer entrenador cuando llegó a la NBA en Orlando Magic, y última víctima de la gran defensa de los Clippers en el partido que les enfrentó a Detroit Pistons, todo lo que pudo aprender de él en el aspecto defensivo.
«Casi cualquier concepto de defensa de equipo que sé del baloncesto moderno de la NBA lo aprendí de Stan. Creo que siempre he sido de esta manera, pero él lo reforzó. Quería que nos mirásemos en el espejo y nos auto evaluáramos en cualquier momento.»
Esa auto evaluación es vital para cualquier entrenador en la NBA. Pero para Van Gundy, se extiende a un nivel un poco más personal:
«Mi mujer me recuerda a esto constantemente cuando me dejo llevar por las victorias y las derrotas :la vida es sobre las relaciones. He sido muy, muy afortunado a lo largo de mi carrera de entrenador universitario y luego en la NBA dónde he entrenado a algunas personas muy grandes y a las que tengo un gran respeto. Cuando es mutuo, es obvio que es una gran sensación, especialmente de un tipo como J.J, a quien tanto respeto «.
El respeto de Redick por Van Gundy ha sido duradero, incluso durante los tiempos difíciles a principios de su carrera. Tras ser nombrado mejor jugador universitario en 2006, Redick jugó 14`8 minutos por partido durante su temporada de novato en Orlando en 2006-07, luego vio como su tiempo en cancha cayó a 8`1 minutos por partido en 2007-08, su primera temporada con Van Gundy.
«Ese primer año con Stan fue duro, pero fue una especie de autoevaluación. Creo que a mitad de año dije:vamos a ganar más de 50 partidos y seremos uno de los tres primeros del este, quizás era algo que estaba haciendo yo, quizás no era Stan.”
Redick describió su tercer año en la liga como un trampolín en su desarrollo personal. Fue un año de confianza, y un año en el que cimentó su creencia de que podría quedarse en la NBA.
«Cuando tienes un gran compromiso para ganar como J.J. juegas duro y eres inteligente, vas a ser un defensor muy bueno, sobre todo como parte de un equipo de hombres inteligentes y duros que quieren ganar, no será demasiado difícil para ellos mantener la defensa». Explicó Van Gundy tras el encuentro.
Los minutos de Redick subían cada año en Orlando después de su segunda temporada, con un promedio de más de 25 minutos y con números de dos dígitos en anotación en cada una de sus últimas dos temporadas con Van Gundy, le valió para ser una de las claves que llevó a Orlando Magic a la final de la NBA en 2009. La pregunta es ¿volverá J.J. Redick a dar todo de sí mismo para llevar a los Clippers a sus primeras finales?.
