El Agitatoallas, semana III: Boston, tenemos un problema

Repaso a la horrible semana de los Celtics

Montaje: Álvaro Méndez.
Montaje: Álvaro Méndez.

¿Recuerdan cuando los Celtics eran un magnífico equipo defensivo? Después de lo visto desde hace unos días parece que ya ha pasado una eternidad, pero lo cierto es que solo medio año nos separa de ese tiempo mejor. Ha sido muy difícil encontrar algo positivo para esta nueva edición de ‘El Agitatoallas’ entre los golpes al PC y la televisión y a los insultos varios, pero uno es un profesional y como cada jueves trae este particular repaso a la semana de los verdes. Ya que no hemos podido durante los partidos, lo hacemos ahora. ¡Toalla al viento!

¿Rebote? ¿Eso qué es? ¿Se puede comer?

Era un problema que conocíamos desde antes del comienzo de la temporada, pero no deja de sorprender. Boston no atrapa un maldito rebote, y eso está causando estragos en la salud de la parroquia Celtic. Jugar contra los verdes es muy fácil para los rivales: me juego el tiro, si la meto bien, y si fallo ahí estará un compañero para coger el balón y empezamos otra vez. Benjamines contra seniors. Llegará el día en que un equipo ponga cuatro jugadores debajo de la canasta defendida por los de Brad Stevens y el quinto solo tenga que lanzar un balón profundo desde el saque de fondo para que un compañero anote; al más puro estilo de touchdown de los New England Patriots: Brady para Gronkowski.

Ojalá pudiéramos decir que todo esto tiene una solución, pero desafortunadamente, ni una próxima (esperemos) vuelta de Al Horford mejoraría en demasía el asunto. Echando mano a mi gran conocimiento del baloncesto, no se me ocurre mucho más que subir a Isaiah Thomas en plan saque desde la línea de touch en rugby, contratar gente que no haya visto un balón de baloncesto en su vida y que o bien midan 2.20 metros, o bien tengan más culo que Jared Sullinger y Kim Kardashian puestos uno al lado del otro para el box out, o simplemente dejar que los rivales anoten y salir al contraataque. Esperemos que Brad Stevens tenga otro plan muy lejano a estas estúpidas opciones, o estamos apañados.

Cluedo: Edición Al Horford

Siguen pasando los días en el inicio de temporada NBA, y el caso del flamante fichaje veraniego de los Celtics continúa sin estar resuelto. Desde que recibiera un golpe en la cabeza de un compañero durante un entrenamiento, Al Horford no ha conseguido superar el protocolo para conmociones de la liga, y Boston está acusando mucho su ausencia. Mucho se está especulando acerca de la lesión del pívot dominicano, pero a nosotros, que somos unos morbosos de mucho cuidado, lo que de verdad nos interesa es conocer la identidad del responsable de ese golpe que nos ha colocado a Tyler Zeller en el quinteto titular. 

Si hablamos de choques, los dos primeros sospechosos son claramente Marcus Smart y Jae Crowder por méritos propios. Ambos han demostrado de sobra ser los más duros (tampoco tenían una competencia muy digna) de la plantilla de los Celtics, y vista su intensidad en los partidos que por lo que sabemos también aparece en los entrenamientos, no sería de extrañar que alguno de estos dos «animalitos» cogieran desprevenido al bueno de Horford y hala, al hospital. Otra teoría podría rondar el terreno de la competencia, y ahí tendríamos que señalar a los que pueden ocupar su puesto. El primer nombre que me viene a la mente es el de un Zeller que ha ganado la titularidad de ese golpe, pero me parece rematadamente extraño que alguien con tan poquita sangre en las venas (Mickey, tú también estás descartado) sea capaz de hacer daño a un compañero durante una sesión de práctica. Tampoco me inclino por Olynyk, que ya sabemos de sobra que es más de hombros, y Amir Johnson seguro que estaba trabajando su impoluto lanzamiento de triple, así que otro nombre tachado. Contando con que Avery Bradley se estaba maquillando las ojeras, Jaylen Brown seguro que estaba estudiando en ese momento, que un choque contra Isaiah Thomas sería una mosca para Horford, y que «El Tren» Rozier había salido la noche anterior… Apuesto por el mayordomo James Young, con el candelabro y en Waltham. ¿Gané?

Vuelve el Rock N’ Roll

Lo echábamos de menos. Esa melena al viento, ese intento de barba propio de un adolescente, esas pintas de tener un grupo de música y tocar en el garaje de su madre. Kelly Olynyk está de vuelta, y con él llega la defe…, digo el rebo…, digo, ¡¡HA VUELTO OLYNYK!! Fuera de bromas, el retorno a las pistas del jugador canadiense es una gran noticia para unos Celtics que empezaban a necesitar sitio en la enfermería. El #41 ayudará sin duda al potencial ofensivo del equipo, pero todavía hay que esperar a que coja ritmo tras superar una lesión en el hombro siempre complicada.

Su debut en la presente campaña no fue el soñado, ya que a Olynyk se le vio aún muy verde y el equipo, por ser finos, tampoco acompañó. Boston sumó su segundo ridículo consecutivo en Washington (echemos la culpa a las elecciones como dijo Tommy Heinsohn), y lo que antes era un tímido pilotito en el cuadro de mando, ahora es una alarma que comienza a coger fuerza a lo largo y ancho de Massachusetts. Esperemos que con la vuelta del melenudo canadiense, y las próximas recuperaciones de Horford y Crowder, el grupo vuelva a encontrar la nota otra vez.