D’Angelo Russell quiere recuperarse al 100 por cien
No forzará su vuelta a la pista
En estos últimos compases del mes de Noviembre, Los Angeles Lakers han conseguido salir vivos con victorias importantes ante OKC y Atlanta, a pesar de unas lesiones que han afectado a jugadores de gran importancia como Julius Randle, Nick Young o D’Angelo Russell. Este último parece ser el más damnificado, ya que como mínimo estará dos semanas más de baja tras recibir un tratamiento de inyecciones de PRP en su rodilla izquierda.
A estas alturas de la temporada, D’Angelo Russell es el segundo máximo anotador del conjunto angelino con 16,1 puntos por partido, solo por detrás de Lou Williams. Esto lo acompaña con 4,8 asistencias y 3,4 rebotes por encuentro. Bien es cierto que son buenos números, pero quizás teníamos unas expectativas algo mayores del comienzo del temporada de Loading.
En estas recientes declaraciones que ha dado a Baxter Holmes, de ESPN, quizás nos descubre una de las claves para que su juego no haya dado el gran salto que muchos esperaban para esta campaña.
«Tenía bastante dolor, pero sabía cómo controlarlo. Sabía lo que no tenía que hacer. Son tantos partidos los que jugamos, que es difícil mantenerse sano cuando estás lesionado e intentar mantener la concentración».
Seguido de esto añadió lo siguiente, refiriéndose a que lleva arrastrando dolor desde el principio de la temporada.
«No me podía mover del modo en que yo quería, así que cuando traté de combatirlo y hacer movimientos para corregir el dolor, no hizo más que agravarse».
En referencia a su actual recuperación quiso dejar claro lo siguiente.
«Definitivamente no quiero forzar nada. Siento que tengo que estar recuperado al 100% antes de volver a la cancha».
En estas próximas semanas, el calendario de Lakers se presenta como un auténtico Tourmalet, ya que 12 de los 15 siguientes partidos se jugarán fuera de casa. Sin embargo, teniendo en cuenta la buena actuación de los jugadores de banquillo y los ases en la manga que guarda Luke Walton, es una buena decisión no apresurarse con la rodilla de Russell y asegurarse así de una completa recuperación.
