Minnesota Timberwolves, a cortar la mala racha
Quieren evitar que se repita la situación del año pasado
A pesar de las expectativas, los Minnesota Timberwolves continúan perdiendo, y están ya en un 5-12 tras la última derrota ante Utah Jazz. Choca ver que la temporada pasada, con unas expectativas inferiores, arrancaron 8-8, aunque luego se sumirían en una negra racha de 6-28 desde finales de noviembre hasta principios de febrero. De hecho, si no fuese por la remontada ante los Suns, los Wolves habrían encadenado cuatro derrotas seguidas, algo que el año pasado sucedió en hasta seis ocasiones, incluso llegando a perder una vez en nueve partidos consecutivos, lo cual sería muy doloroso esta temporada. Y eso es lo que quieren evitar estos Wolves, además de repetir los mismos errores una y otra vez como indicaba Towns.
«No es divertido. Teníamos antecedentes en los que no hemos perdido, y empiezas a ver cómo se acumulan las derrotas como ahora mismo. Es todo cambiarlo, y siempre hay que empezar por uno mismo primero y por el resto después, por eso necesito ser un mejor jugador.»
«Tenemos que pensar que se acabó. Quieres que se termine. Así que es algo nuestro salir ahí fuera y decir que estamos cansados de perder, estamos cansados de cometer los mismos errores, de tener el mismo tipo de cuartos, sea el tercero, el cuarto o cualquiera. Está en nosotros el cambiarlo.»
Los propios jugadores parece que se están acostumbrando a perder día sí y día también, pero están intentando arreglarlo y esperan que el buen momento no tarde en llegar, como comentaba LaVine.
«Hay que mantener la fe, creer en el equipo y en uno mismo. Lo llegaremos a hacer bien, lo arreglaremos. No puedes desmoralizarte. A veces tienes que pasar por esos malos tiempos.»
Cabe recordar también que los jugadores de Minnesota Timberwolves se están acostumbrando a un nuevo entrenador, el tercero en tres años, con un sistema diferente, sobre todo en el aspecto defensivo, algo que ellos mismos notan que están mejorando. Así que esos cambios necesitan un tiempo para ser interiorizados, ya que los grandes equipos incluso necesitan años para construir una buena química. Aunque si hay algo en lo que están de acuerdo, es en que la temporada es larga, con muchos partidos y que hay que permanecer unidos para sacar el equipo adelante.
