
La pregunta que titula el artículo se ha formulado tantas veces que ha perdido hasta el sentido. Se ha escrito muchas veces, se ha afirmado otras tantas, aunque hay una diferencia sustancial entre la expresión de la cuestión hace un par de años y la actualidad. Los Brooklyn Nets son un equipo muy cambiado al de hace dos campañas, donde todavía llegaron a los PlayOffs y quedaban bastantes resquicios de aquel intento fallido de ofensiva hacia el anillo.
Brook Lopez salía en todos y cada uno de los rumores de traspaso, pero pese a todo, él quería permanecer en su casa e intentaba que esto no le afectase lo más mínimo. Deron Williams todavía militaba en las filas neoyorquinas, al igual que Joe Johnson, y el pívot californiano todavía no había cobrado el rol de jugador franquicia que ostenta hoy día, por lo que sacar su nombre a la palestra en todos los rumores era más que habitual.
Sin embargo, en este recién comenzado 2017, Brook Lopez es la pieza clave de estos Brooklyn Nets, su mejor jugador (por mucho), el integrante más talentoso (por mucho también), con más clase y más potencial ofensivo (que no defensivo). La mala noticia, es que ningún compañero de equipo puede secundarle. El conjunto neoyorquino cuenta con una nueva cara esta temporada. Su General Manager (Sean Marks) es nuevo, y ha formado una red increíble de empleados alrededor del equipo en menos de una temporada completa. El entrenador, Kenny Atkinson, ha construido un sistema basado en el ritmo alto y los contraataques, con amplitud de espacios para formar aperturas que den lugar a triples, al igual que penetraciones. Brook Lopez es muy importante en este sistema con su nueva herramienta, el tiro desde el perímetro.
Por eso nos formulamos la pregunta. Actualmente, Brook Lopez ayuda más a los Nets, ¿dentro o fuera del conjunto? Para solventar nuestras dudas, vamos a elaborar algunas ventajas y desventajas que el pívot aporta a la franquicia.
Ventajas
Los puntos positivos que supone mantener al pívot de California en la plantilla son muy amplios. En primer lugar, el jugador contribuye en pista como el que más en Nueva York. Aporta solamente 5.3 rebotes por encuentro, el más bajo de su carrera, es cierto, pero podríamos achacarlo a su mayor libertad en pista, y a tener a un tal Trevor Booker al lado que este año no deja un rebote libre.
Pese a esta tara, el center anota nada menos que 20.3 puntos por encuentro, tapona 1.8 tiros por noche (segundo máximo de carrera), y está consiguiendo career highs en tres apartados, las asistencias (2.7), porcentaje de tiros libres (84.7%) y triples (con un respetable 36.5%, 58 triples en 159 intentos hasta ahora). No pensemos que por anotar actualmente los triples su actuación en la zona desciende, puesto que aunque ronde menos en ese spot, la efectividad sigue siendo la misma (52.6% en tiros de dos). Todas estas estadísticas las está presentando el pívot en solo 29.1 minutos en pista, el mínimo de su carrera (sin contar la temporada donde se lesionó y solo jugó 5 partidos, promediando 27.2 minutos). La productividad con el sistema de Kenny Atkinson es máxima, y es una maravilla ver al pívot anotar:
#NBA Brook López con el poster ante su hermano gemelo
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— Adictos al Basket (@AdictosalBasket) 29 de diciembre de 2016
Por otro lado, hay que destacar que es como el típico empollón de la clase. Es el que hace subir la ‘nota media’, manteniéndola en un 18.8 de PER entre los pívots del equipo, siendo 22.3 el suyo individual, tercero más alto de su carrera. Si le definíamos como empollón, también hay que darle el rol de líder de la tribu, puesto que su potencial liderazgo ha salido a la luz, y ya no es ese chaval que demostraba sus habilidades en pista, pero que no decía una palabra en el vestuario. Pero es que aquí no termina la cosa, sus estadísticas siguen vaticinando mejoras.
Este año Brook anota de promedio 1.2 puntos como el roll man de un bloqueo y continuación, situándose octavo entre los big mans con más de 50 posesiones. También promedia 1.1 puntos por posesión en jugadas de spot up (busca posición para encestar desde el perímetro) marchando séptimo entre los hombres grandes con más de 50 posesiones. El dato de los pick and rolls es impresionante, dado que Brook ha jugado más bien poco con Jeremy Lin, con el que crea un poderoso juego de bloqueo y continuación, y no hay duda en que su mejora en el triple ha potenciado esta estadística.
Nadie duda de que esta mejora sustancial en la productividad y, por ende, estadísticas de Brook Lopez, podría venirle bastante bien a Brooklyn, siempre y cuando el equipo contase con una mayor cantidad de talento para sobrellevar el nuevo sistema de Kenny Atkinson, donde el pívot encaja tan bien. La razón sentimental es otra por la que los Nets se negarían a traspasar al hermano Lopez de pelo corto. Brook es uno de los mejores jugadores de la historia de la franquicia. Es el líder en temporadas jugadas (9), en tapones, segundo en tiros encestados, tercero en rebotes totales, segundo en puntos totales, cuarto en partidos jugados, cuarto en minutos… y así podríamos seguir un rato.
Para terminar con los puntos positivos, hay que añadir que la aventura triplista de Brook Lopez ha comenzado este año, y si está tirando tan bien y encontrando los huecos necesarios con tan poca experiencia en el mundo del triple, a saber qué hará y cómo se reflejará en pista en años próximos. Los directivos se tirarían de los pelos si le traspasan y el año que viene empieza a tirar con un 40% desde el triple y promediar 25 puntos por partido… Un gran incentivo para mantenerle, es su contrato. Los 60 millones en tres años que firmó parecen una ganga con el nuevo convenio, y encima poseen cláusulas contra sus clásicas lesiones. No parece que estas cláusulas vayan a hacerse efectivas en un futuro, dado que Brook Lopez salió de su problema con las lesiones hace un par de años, y lleva bastante tiempo jugando sin tener que parar a descansar por perjuicios, solo por decisión técnica.
Desventajas
Las desventajas o puntos negativos que Brook Lopez genera para la franquicia neoyorquina son bastante visibles, aunque existen algunos entramados que pueden dar más juego. Brook Lopez es una maravilla en el costado ofensivo de la pista, reconocido como uno de los mejores pívots de toda la liga en ese apartado. Sin embargo, y como todo el mundo tiene fallos, el center no iba a ser menos.
Antes hemos delatado su principal fallo, que es el rebote. Un cinco con buena presencia en la liga, siendo el jugador franquicia de un conjunto, no puede permitirse coger simplemente 5.3 rebotes por partido. Sus dos mejores marcas en el apartado reboteador son en su año rookie (8.1 rebotes por encuentro) y su año de sophomore (8.6). Y desde ahí, su importancia ofensiva aumentó, y parece que su evolución en la faceta defensiva se estancó. El año pasado, promedió 20.6 puntos y recogió 7.8 rebotes, acercándose a la decencia para un pívot, aunque este año ha sorprendido mostrando la cifra más baja de su carrera en el apartado.El porcentaje de rebotes totales es el segundo más bajo de su carrera (9.5%). No vamos a entrar en si Kenny Atkinson le permite dejar a un lado los rebotes (algo que, personalmente, dudo) porque su verdadero cometido está en el ataque o no, sino que vamos a dejarlo como un punto negativo.
La defensa es otra de las asignaturas pendientes de nuestro sujeto. Cierto es que es un notable jugador a la hora de taponar tiros, registrando 1.8 por partido hasta ahora en la liga, pero es bastante nulo en otros apartados defensivos. Su rapidez lateral es de risa, y su intimidación en relación a los demás jugadores es bastante baja (ya vimos qué miedo le dio a Larry Nance Jr., Kevin Durant o Karl-Anthony Towns posterizarle).
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— Never Forget Bot (@forgetmebot) 15 de diciembre de 2016
Este año, el rating defensivo de Lopez (108.9) es el segundo peor de su carrera, mostrando también un rating neto nefasto (-5.4). Es decir, cuando el pívot está en pista, su equipo encaja puntos a ritmo de estos registros. En definitiva, la defensa de Brook Lopez contribuye perfectamente a que la defensa conjunta de los Nets siga siendo una de las peores de la liga.
La edad es otro de los problemas para que el pívot pueda ser fuente de reconstrucción de una franquicia, plan en el que se ha decidido usarle. Sus 28 años y 278 días dan muestra de un jugador ya experimentado en la liga, sí, pero no una pieza sobre la que reconstruir, como ya se especificó antes del comienzo de temporada para desmentir los rumores de traspaso. La posesión de pocos assets y un solo jugador estrella puede hacer que la directiva se piense si traspasarle o no.
Resumen
En resumen, Brook Lopez da una serie de ventajas y desventajas a la franquicia de los Brooklyn Nets. Nosotros nos hacemos la pregunta, la directiva tiene la respuesta, y puede guiarse por dos caminos muy diferentes, pero con mismo final:
El primer camino es el difícil: deshacerse de Brook Lopez. Habría que terminar con la última pieza del superequipo que el bueno de Mikhail Prokhorov montó para asaltar las Finales, pero que nunca resultó. Si los Nets se planteasen traspasarle, lo que podrían obtener, de boca de Adrian Wojnarowski y Bobby Marks, principales componentes del podcast de The Vertical, sería lo siguiente: Woj sugiere dos primeras rondas o una primera y un jugador joven con potencial, mientras que Marks se basa en el traspaso de Cleveland por Mozgov, donde dieron a cambio dos futuras primeras rondas muy protegidas.
Los Nets tendrían una base joven, aunque sin mucha experiencia, y la agencia libre podría resultar o no satisfactoria para el equipo, puesto que la marcha del pívot hace de Brooklyn una franquicia menos apetecible. Con las mismas instalaciones y el centro de entrenamiento más caro de la NBA, pero menos apetecible.
El segundo camino ya es algo más fácil: mantener a Lopez. El pívot se quedaría en la franquicia, y el equipo no tendría que ver salir a uno de los mejores jugadores de la historia de la misma. Pero todo tiene una parte negativa, dado que los Nets se quedarían un futuro claro hasta el año 2019, donde vuelven a poseer su primera ronda, sin cambios ni tonterías, y se libran por fin del castigo del traspaso de 2013 con los Boston Celtics.
Por otro lado, la agencia libre, aunque seguiría siendo una lotería, tendría a Brooklyn como un destino considerable con mejores jugadores como Lopez y Lin, para poder formar algo más que otro simple proyecto de reconstrucción.
Los dos caminos son opciones a tomar por la directiva de los Nets, pero no olvidéis que ellos son los que tienen la respuesta, y nosotros seremos simples testigos de su elección. ¿Seguirá Brook Lopez en Brooklyn al final de esta campaña?