Pedro Martínez, el artífice de la mejora del Valencia Basket

Nombrado entrenador del mes de diciembre

Pedro Martínez, el artífice de la mejora del Valencia Basket – Carlos Calvillo

“Tu éxito no será un premio, sino una consecuencia de tu decisión, de tu perseverancia y la constancia de tu propósito” –escribió Javier Iriondo en ‘Donde tus sueños te lleven’. Esta es la frase que define la implicación e importancia de Pedro Martínez en el actual Valencia Basket.

Era la temporada 2014-15 y tras un mal arranque de temporada en el cual las exigencias de Velimir Perasovic pasaron factura en algunos de sus jugadores, tanto el club como el croata separaron sus caminos. Fue un momento duro para ambos, puesto que fue el último entrenador en lograr una Eurocup con la escuadra taronja. Carles Duran fue el encargado de recoger el testigo. El catalán tenía fama de buen entrenador por su gran trabajo con los jóvenes talentos de la penya, pero nunca había debutado en la Liga Endesa como head coach.

El Valencia Basket decidió apostar por Duran para el final de temporada, en una confianza que fue clave para verle ahora dirigir a los hombres de negro. Ese puesto se lo ha ganado desde el trabajo y la humildad que siempre desprende sobre las pistas y fuera de ellas, acompañado de una gran sonrisa. De esas personas que se entrega por los demás y no duda en detenerse a firmar autógrafos. Son detalles que le hacen grande, y oye, me alegro mucho de que le vaya encontrado su oportunidad en el norte. Se lo ha ganado a pulso.

En junio de 2015 el club decidió relegar a Duran a un segundo plano para contratar a Pedro Martínez como entrenador jefe. Quizás hubiera sido un tanto arriesgado mantener al actual preparador del Dominion Bilbao Basket al frente del equipo, debido a su escasa experiencia. Sin embargo, si nadie le hubiese proporcionado esa oportunidad probablemente nunca sabríamos lo que realmente puede aportar Duran a sus equipos.

Personalmente me alegré mucho por el fichaje de Pedro Martínez, puesto que siempre me ha parecido un entrenador adecuado para la Liga Endesa. Conoce la competición mejor que nadie (actualmente es el técnico que más partidos acumula) y sabe cómo sacar lo mejor a los jugadores españoles. Sí, quizás suene un tanto patriótico, pero es necesario apostar por los jugadores nacidos en el país en el cual estás entrenando. Es cierto que hay parte de la afición a la que no le gusta esa confianza excesiva por los jugadores nativos porque se han llegado a perder partidos por darles demasiado protagonismo. En parte tienen razón, la capacidad de liderar el ataque taronja de Diot y la de Vives son muy diversas, cada uno tiene unas características en el juego. La temporada pasada se dieron casos en los que el francés estaba en el banco para dar una mayor presencia al ex base del Joventut, aunque el catalán no cuajara bajo la batuta. Pese a ello, me encanta como está sabiendo administrar los minutos a cada uno de los componentes del equipo.

Carlos Calvillo, SB

Hay otros casos, como por ejemplo el de Pierre Oriola cuyo rendimiento en la escuadra valenciana no hubiera sido posible sin la confianza que le proporciona cada día el técnico catalán. Así es como Vives logró despuntar de nuevo en los pasados Playoffs ante el Real Madrid, algo que ya hizo la temporada anterior con Duran. Pedro tiene un don que proporciona confianza en sus jugadores y eso le hace grande.

No es nada fácil ponerse en la piel de un entrenador que tiene que plantear un partido con doce jugadores. Mantenerlos a todos contentos es muy complicado. Esa fue una de las razones por las que se optó por la cesión de Vladimir Jankovic al Aris de Salónica. El alero serbio apenas tenía minutos y prefería poder crecer y desarrollarse en otro lugar por eso desde la entidad valenciana decidieron mandarlo a Grecia. Fue una decisión acertada a la vista de los resultados y la química del vestuario.

Desde la Secretaría Técnica han sabido confeccionar un gran barco, pese a las turbulencias del comienzo en el que vimos bajarse a John Bryant (claramente pasado de peso) y posteriormente a Jankovic. Fichar a Bryant fue una decisión arriesgada, puesto que regresó del periodo estival con unas medidas que no se caracterizaban con el cuerpo de un deportista. Poco tardaría en llegar Viacheslav Kravtsov, un interior con gran poderío para dominar la pintura. Claramente está cumpliendo con el rol demandado.

Carlos Calvillo (SB)

No resultaba nada sencillo reemplazar a un Justin Hamilton que dejó una huella imborrable y se marchó directo a la NBA, su lugar en el mundo. Hay que reconocer que contar con los servicios del actual pívot de los Brooklyn Nets fue toda una gozada, un sueño difícil de lograr despierto. Fue muy arriesgado traerle a la capital del Túria pero su rendimiento estuvo a la altura de las estrellas.

Pese a la salida de Hamilton y los dos fichajes no acertados, Pedro Martínez ha sabido reconducir al equipo y situarlo en el lugar donde merece estar, a la altura de los más grandes, aunque a Bertomeu se le olvide… Este club merece disputar la Euroliga cada temporada, por sus últimos años de historia y por su cultura del esfuerzo.

El buen ambiente que se respira en Valencia, tanto en la afición como en el equipo, genera una gran unión entre ambas partes. Al comenzar la temporada, existían una serie de dudas, puesto que el juego no convencía pese a las victorias, pero el trabajo ha sido clave para darle un vuelco a la situación. El técnico taronja tiene gran parte de culpa de que la buena fe que existe entre la afición y sobre todo las esperanzas puestas en conquistar la Eurocup.

No era nada sencillo situarse de nuevo con los mejores, pero el trabajo diario de este bloque ha permitido ganar encuentros complicados, algunos de ellos con una mayor diferencia de la esperada. Por cosas como estas, Pedro Martínez ha sido nombrado Entrenador del Mes de diciembre; el equipo marcha 10-4 en la competición doméstica y 10-1 en la Eurocup. Un premio más que merecido.