DeMarcus Cousins muestra su lado más caritativo

DeMarcus Cousins es uno de los jugadores más polémicos de la NBA. El pívot de los Sacramento Kings es conocido por su carácter explosivo y poco predecible cuando está en la cancha. Se le ve constantemente reclamando a los árbitros y por muchos de esos reclamos se ha ganado faltas técnicas (lidera esta categoría en la NBA esta temporada), además de verlo con cara de pocos amigos en la mayor parte de los juegos.

Pero Cousins no es solo amargura y gritos, el jugador tiene una faceta generosa y amable fuera del campo. El pívot en las fechas navideñas se vistió de Papá Noel al comprar regalos para niños con escasos recursos en Sacramento y su ciudad natal, Mobile, Alabama. También compró un nuevo marcador para una escuela secundaria local e incluso pagó el funeral de un jugador de fútbol de la escuela secundaria local que perdió la vida en un tiroteo.

En el viaje a Chicago para enfrentarse a los Bulls el sábado 21 de enero (en el que los Kings sumaron una nueva derrota), DeMarcus Cousins salió del hotel y vio a varios niños que vendían barras de chocolate para la caridad, pero las personas estaban concentradas en los jugadores y no les prestaban atención a los chicos. DeMarcus, al verlos metió su mano al bolsillo y compró todas las cajas con barras de chocolate que tenían para vender. Según una fuente cercana al equipo, el jugador regaló estos chocolates al personal de vuelo cuando viajaban hacia Detroit, lugar donde se enfrentarán a los Pistons en su próximo encuentro en la noche del lunes.

No todo es lo que parece, DeMarcus Cousins también tiene un lado noble y generoso, aparte de la personalidad dura que muestra cuando juega al baloncesto.