Un singular factor condena a los Charlotte Hornets

Sumaron 22 balones perdidos ante los Rockets

Kemba Walker hornets
Keith Allison (CC)

Desde la llegada de Steve Clifford a los banquillos de los Charlotte Hornets el equipo ha sufrido un lavado de cara pasando de ser el peor equipo de la NBA a ser un equipo que lucha por entrar a los Playoffs año tras año. Clifford ha conseguido dotar al equipo de una filosofía clara de juego, esta se basa en juego pausado intentando minimizar los errores, esto ha llevado al conjunto de Carolina a ser las últimas dos temporadas la franquicia con menos pérdidas de balón. Esta temporada siguen en la misma línea de ser uno de los mejores equipo que miman el balón, siendo el segundo equipo que menos pierde con un total de 12’1 por encuentro, justo por detrás de los Dallas Mavericks que pierden 11’7 posesiones.

Para un equipo como los Charlotte Hornets el minimizar errores es un factor clave para el devenir de los encuentros, ya que no es una plantilla que disponga de muchos jugadores que anoten con fluidez y puedan permitirse perder balones con cierta holgura. En la jornada del jueves, el punto clave de mimar el control del balón no se cumplió y el resultado fue una derrota clara contra uno de los mejores equipos de la NBA, los Houston Rockets.

Al finalizar el encuentro le preguntaron a Steve Clifford cual creía que había sido el factor clave en la derrota de su equipo, este sin dudarlo y sin la ayuda de revisar el vídeo del encuentro dijo que las pérdidas. El equipo perdió ni más ni menos que 22 balones, factor que aprovecharon los Rockets para anotar 27 puntos. La cifra de 22 pérdidas es el tope realizado por los Charlotte Hornets esta temporada, el máximo número cosechado hasta esta pasada madrugada fue de 19. Esta estadística negativa tiene bastante que ver con que el dominio del encuentro siempre fue de los Houston Rockets, contagiando así a los Charlotte Hornets a un juego más dinámico y fluido del que están acostumbrados a realizar. El jugador que más se dejó llevar por un juego más alocado fue Kemba Walker y esto le llevó a perder 6 balones en todo el encuentro

La dinámica del equipo no es buena en estos momentos con 8 derrotas en los 9 últimos encuentros, si ya se empieza a perder el estilo de juego que han llevado al equipo en las últimas temporadas a entrar o luchar por posiciones de Playoffs, los síntomas sobre el trascurso de la temporada son preocupantes. Esperemos que el parón de All-Star siente bien al equipo y vengan de las vacaciones con energías recargadas para competir por entrar en la pos-temporada.