¿Kyrie Irving o Dejounte Murray?

En la posible salida de Kyrie Irving de los Cavaliers, se menciona a los San Antonio Spurs como posible destino del jugador.  Sin entrar en detalles de la factibilidad de la operación, me arriesgo con la siguiente sentencia: A los Spurs les conviene apostar por el desarrollo de Dejounte Murray. A continuación, esbozaré tres respuestas a tres preguntas a través de las cuales llego a esa conclusión.

En la temporada 2016/2017 Dejounte Murray tuvo promedios de 3,4 puntos, 1,1 rebotes y 1,3 asistencias en 8,4 minutos por partido. Kyrie Irving tuvo 25,2 puntos, 3,2 rebotes y 5,8 asistencias en 35,1 minutos por partido. Leyendo estos números mi respuesta es sencilla: Consíganme a Kyrie Irving ya mismo. Como cuando de chico veía baloncesto, y aplicaba la matemática: Si mi equipo hacía cien puntos, y a la siguiente temporada sumamos a Kyrie Irving haríamos ciento veinticinco. Pero la matemática no aplica en el baloncesto. Y a veces la suma de las partes puede destruir al todo. Debo reconocer que desde que Kyrie Irving tuvo un partido sin asistencias, nunca más pude confiar en él. Base, ¡y sin asistencias! Con un base así un equipo no puede ser campeón de la NBA, a menos que tengas a LeBron James al lado.

No es que subestime al base nacido en Australia, pero insisto: CERO asistencias en un partido. Todavía le hago pagar ese partido cuando todos me hablan de él. No obstante mi recelo con este estilo de jugador, Kyrie Irving se convirtió en estrella y con los Cleveland Cavaliers llego a tres finales (Pese a que la primera no la pudo disputar por su lesión), alcanzando a ganar una de ellas, en aquella histórica remontada contra los actuales campeones Golden State Warriors, incluyendo el tiro ganador en el juego siete de la serie. Kyrie Irving es un talentoso jugador que no lo quiero en mi equipo.

Arranco por una duda sencilla: ¿Cómo encajaría un talento innegable como el de Kyrie Irving, aunque individualista, en un equipo que hizo culto al pase extra? Sinceramente, creo que son una pareja no correspondida. No se convienen mutuamente. Irving vería limitado su talento al equipo, y los San Antonio Spurs verían un filtro en su esquema de equipo. En un equipo donde la defensa y el pase extra tienen un papel preponderante, traer a un jugador que no se caracteriza precisamente por su buena defensa y por gustar de pasar la pelota (Todavía recuerdo aquellos partidos de Irving sin asistencias siendo base, y considerando como se cuentan las asistencias en la NBA) puede resquebrajar la esencia del equipo tejano, dos de las armas que tiene para ser considerado contendiente.

Es cierto, necesita una renovación. Necesita alguien además de Kawhi Leonard. LaMarcus Aldrige tiene que hacerse cargo del papel para el cual lo trajeron. Hoy, Kyrie Irving no es el paso adelante que necesitan los San Antonio Spurs para presentarle batalla a los Golden State Warriors. Dejounte Murray no será el base campeón con Cleveland y de hecho probablemente nunca lo sea, y aún le queda mucho camino por recorrer, ganar kilos, tiros y mejorar en defensa. Pero ese desarrollo necesario no atenta contra las armas de su equipo.

En relación a esto último, la siguiente pregunta es: ¿Cuántos años van a dominar los Golden State Warriors? En él mientras tanto, hay que analizar que es mejor: Si jugarse la épica de destronarlos, lo cual iría por el camino de traer a Irving, o aprovechar estos años preparándose para estar al acecho apenas cedan un poco de protagonismo los Warriors. Si no estás a la altura, es mejor aceptar esta condición y prepararse para estarlo. Hoy no ganarás, pero mañana sí. En esto, encaja perfecto Dejounte Murray. Equiparar el talento con los Golden State Warriors es muy difícil, ¿Por qué no tratar de vencerlos por otro camino? Después de todo, aquellos Miami Heat post “The Decision” ¿No eran el superequipo? Y sin embargo San Antonio Spurs le gano la final en su último campeonato logrado.

Por último, ¿Es Dejounte Murray realmente un valor para darse el lujo de no considerar a Kyrie Irving? Yo creo que sí. Quizá no sea la estrella que es Kyrie Irving, pero tiene condiciones para convertirse en buen escudero de Kawhi Leonard. Con la ventaja de tener a un excelente formador como Gregg Popovich, con más minutos por la ausencia de Tony Parker y con un año de experiencia, Dejounte Murray tiene que tener la confianza de poder elevar su juego y ser consistente toda la temporada, y demostrar que es capaz que suplir al francés y empezar a tomar la posta que deja este. Tiene que sumar kilos, mejorar su tiro y su defensa. Pero tiene camino por delante para ir desarrollándose.

Por esto es que firmo mi sentencia: Los San Antonio Spurs tienen que apostar al desarrollo de Dejounte Murray. Ya no son esa máquina súper aceitada que por un triple no le gano la final al Miami de Dwayne Wade, LeBron James y Chris Bosh, pero que al año siguiente tuvo su revancha desplegando un juego por demás vistoso. Ya no está Tim Duncan, y Tony Parker y Emanuel Ginóbili ya no pueden tirar del carro solos. Kawhi Leonard ya se hizo cargo y tomo el bastión para convertirse en el líder de los San Antonio Spurs.

Pero en Texas necesitan de LaMarcus Aldrige reencarne nuevamente en el jugador que eran en los Portland Trail Blazers y que los juveniles del equipo, Kyle Anderson, Bryn Forbes y Dejounte Murray emerjan. Pau Gasol, Rudy Gay, Danny Green y Patrick Mills estarán ahí para ayudar a tirar de la máquina. El baloncesto se reinventa pero hay algo que nunca cambia: Siempre hay un solo campeón, y veintinueve equipos que buscan la manera de ocupar su lugar y cada uno con sus armas buscan llegar a ese lugar de privilegio. Hoy los Golden State Warriors marcan el camino, y los demás equipos tienen que reinventarse para detener su avance. Pero los San Antonio Spurs no necesitan una estrella  como Kyrie Irving, necesitan aceitar nuevamente su máquina, no romperla.