Primer partido de la segunda vuelta de la Turkish Airlines Euroleague y sorpresa rotunda en Málaga, donde un mermadísimo Valencia Basket sin seis titulares se impuso por 83-85 en la cancha de un Unicaja Málaga que venía de una racha positiva. Sin ir más lejos, los andaluces habían ganado al mismo Valencia hace 48 horas en el encuentro de Liga Endesa, imponiéndose por 76-67.
La dinámica del encuentro entre los hombres entrenados por Joan Plaza y los de Txus Vidorreta era bastante parecida a la de hace dos días, con un Valencia Basket capaz de mantener equilibrado el marcador contra un rival más en forma por mitad partido, para luego rendirse en la segunda parte, debido al sobresfuerzo de los pocos hombres hábiles del equipo taronja. El partido parecía acabado cuando el electrónico marcaba 56-39 a falta de 7’39 para que terminase el tercer cuarto. Un soberbio Nemanja Nedovic, capaz de anotar en cualquier tipo de situación de juego, y los rebotes ofensivos daban alas a los hombres de casa, en un Martín Carpena siempre más animado, que ya estaba saboreando la doble victoria en dos días contra los ya clásicos rivales.
Pero el baloncesto es el deporte que más emociona a quien escribe y a quien lee porque nunca se puede dar nada por descontado, siempre puede ocurrir algo, hasta lo más improbable. Y el Valencia Basket consiguió una remontada heroica, que cuesta aún de creer. Sin Antoine Diot ni Guillem Vives en posición de base, sin las magias de Fernando San Emeterio ni sin Joan Sastre en el rol de alero, sin Latavoius Williams o Sergi García que aún no se estrenaron de taronja; con Erick Green desacertado y Bojan Dubljevic a medio servicio.
La remontada perfecta de Valencia Basket
Pues los levantinos, ahora sí, devolvieron a sus enemigos un partido muy parecido al famoso tercer encuentro en la final de Eurocup del año pasado, en ocasión del cual habían sido los verdes a imponerse contra todo pronóstico y circunstancias en la Fonteta.
La justa mezcla entre los más veteranos Sam Van Rossom (15 puntos, 7 asistencias, 3 rebotes) y Rafa Martínez (17 puntos con 3/4 en triples) con la fresca juventud de Alberto Abalde, autor de 16 puntos con 7/9 en tiros de campo, fue una de las claves. Digno de elogio el esfuerzo en la pintura de Tibor Pleiss, MVP taronja con 12 puntos, 8 rebotes y 21 de valoración.
El Unicaja, por su lado, empezó muy bien, lanzando con buenos porcentajes en la primera parte, pero quizás se relajó tras tocar el +17 en el tercer periodo, bajando la intensidad defensiva, lo cual permitió al Valencia Basket de volver a abrir un encuentro que parecía cerrado. Finalmente, todas las estadísticas cambiaron de color durante los últimos 17,5 minutos, porque los taronja acabaron tirando mejor e incluso capturando más rebotes.
Los valencianos suman su segundo éxito consecutivo en Euroliga, el quinto total. Siguen en la parte baja de la clasificación, pero una victoria así da moral. Al contrario, el Unicaja Málaga se lleva una derrota tras haber saboreado el éxito y compromete sus posibilidades de pase a la siguiente fase.