Cleveland Cavaliers 2018-2019: Una nueva vida sin el Rey
Kevin Love será la estrella del nuevo proyecto de Ohio
La temporada 2018-2019 será la de salida una vez más para los Cleveland Cavaliers. El equipo comienza de nuevo ya que todo el camino realizado hasta ahora ha sido de la mano de un gigante como es LeBron James que de nuevo ha dejado huérfana a la ciudad de Cleveland. Al igual que pasara en la temporada 2010-2011 el equipo se ve roto ante la marcha de su máxima estrella, sin un estilo de juego marcado, un referente que tire del equipo y por lo tanto ante la que probablemente sea una temporada como mínimo complicada.
Pocas son las luces que pueden aparecer la próxima temporada en la ciudad de Ohio, teniendo en cuenta que la mayoría de las carencias del juego que se observaron la temporada pasada eran solventadas por un jugador que ya no se encuentra en la plantilla. Uno de los pocos jugadores que pueden hacer que los aficionados tengan ilusión es Collin Sexton un rookie seleccionado en la octava posición del pasado Draft. El base tendrá la “suerte” de formar parte de un equipo poco competitivo y en pleno comienzo de reconstrucción que le permitirá gozar de una gran cantidad de minutos, balones y lanzamientos para forjarse y moldearse así mismo. El resto de la plantilla deberá dar un paso adelante para no caer directamente a los últimos puestos de la conferencia.
Una temporada inexplicable
La marcha de Kyrie Irving marcaba el comienzo del nuevo curso de la NBA y dejaba dudas de si Isaiah Thomas podría suplir al base australiano. El equipo arrancaba con dudas y las incorporaciones no daban el nivel esperado, por lo que antes del cierre de mercado se realizaba una gran revolución. Pese a las nuevas incorporaciones el equipo acababa la temporada con un récord de 50-32, siendo el peor de la segunda etapa de LeBron James en Cleveland. El juego de la franquicia era un monólogo del alero, siendo quien tiraba del carro y realizaba actuaciones apoteósicas que no siempre servían para lograr la victoria.
Aunque el juego y los resultados no acompañaban, los Cleveland Cavaliers alcanzaban su cuarta final consecutiva tras necesitar dos séptimos partidos (Indiana Pacers en primera ronda y Boston Celtics en la final de conferencia). En las Finales fueron barridos por Golden State Warriors y ese resultado unido al resto de problemas a lo largo de la temporada provocaron la salida de su jugador estrella.
Colocar la primera piedra
La temporada que se avecina no se prevé que sea muy exitosa para los Cleveland Cavaliers, ya que resulta difícil imaginar al equipo estando entre los ocho primeros clasificados sin contar con LeBron James. Por lo que el objetivo principal que deben marcarse los de Ohio es colocar los cimientos de la franquicia para tener un buen futuro en las próximas temporadas. El estilo de juego es una de las incógnitas que sobrevuela el Quicken Loans Arena, porque la mayoría del juego se fundamentaba en el jugador estrella del equipo que ha puesto rumbo a la Conferencia Oeste.
Otra de las cuestiones que deben tratar son los jugadores que van a formar parte del proceso y cuáles deben abandonar la franquicia. La identidad del equipo va a ser por lo cual la cuestión más importante a tratar la próxima temporada debido a que es de vital importancia para conocer el rumbo del equipo en los próximos años de reconstrucción.
Un Kevin Love made in Minnesota, la gran esperanza
Tras la marcha de la máxima estrella de las últimas cuatro temporadas, Kevin Love se encuentra en una situación muy similar a su primer equipo en la NBA los Minnesota Timberwolves. El jugador interior vuelve a estar en un proyecto en construcción en el cual es el pilar básico y sobre el que se edifica el proyecto.
El natural de California será el gran destacado del equipo y deberá recuperar su máximo nivel, aquel que logró en su última temporada en el equipo del Oeste (2013-2014). Que vuelva a ser un jugador dominante tanto fuera como dentro de la zona es lo que esperan tanto los aficionados de los Cavs como los directivos de la franquicia, teniendo así la primera pieza del futuro del equipo.
Toda la confianza de los Cleveland Cavaliers ha sido depositada en él, siendo un fiel reflejo de esto la renovación que ha firmado con el equipo por cuatro años y 120 millones. Si las lesiones respetan al ala-pívot, la próxima temporada será presumiblemente el máximo anotador de los Cavs. En cuanto a su juego, se espera que vuelva a apoderarse de la zona del rival como hiciera en su etapa en Minnesota aumentando sus números en el rebote, promediando al final de la temporada un doble-doble y dejando grandes actuaciones.
Un rey exiliado y un posible sucesor
Las modificaciones en la plantilla de cara a la temporada que viene se pueden resumir en una baja imprescindible y una llegada que puede ser de lo poco positivo que saca el equipo. La mayor diferencia respecto al curso pasado es clara, LeBron James ha dejado de formar parte de la plantilla. Uno de los mejores jugadores de la historia ha abandonado el equipo y lógicamente esto será determinante en la franquicia tanto en el plano deportivo como económico (ya que el jugador de Akron atraía a una gran cantidad de anunciantes).
Las otras dos bajas han repercutido en el banquillo. La marcha de Jeff Green reduce el potencial ofensivo desde la segunda unidad, ya que el jugador mostró un gran papel en la fase final de la temporada. El base José Manuel Calderón también ha abandonado el barco de los Cavaliers, perdiendo el equipo experiencia y un jugador con una gran visión de juego y mentalidad.
/ Jason Miller Cleveland Cavaliers.com
Respecto a las altas, el equipo ha incorporado vía Draft a un jugador que puede ser una de las pocas buenas noticias que tengan los de Ohio a lo largo de la temporada. Collin Sexton llega tras ser elegido en la octava posición y disfrutará de bastantes minutos teniendo en cuenta que es uno de los jugadores más importantes del futuro de la franquicia. Otra de las incorporaciones es Sam Dekker un jugador que aportara frescura e intensidad desde el banquillo.
