ANÁLISIS | Magic Johnson se baja de la nave angelina
La leyenda de la franquicia sorprendió con su decisión
Durante la madrugada del 9 al 10 de abril de 2019, se produjo una gran sorpresa en el seno de una franquicia histórica como Los Ángeles Lakers. Sin haberlo hablado anteriormente con los dirigentes, Magic Johnson comunicó a la prensa que había decidido apartarse de sus funciones de presidente de operaciones de baloncesto para los angelinos. Esta decisión llegaba tras una crisis profunda acentuada con el hecho de que los Lakers se perderán una temporada más los Playoffs a pesar de la llegada de un LeBron James al que se creía con poderes mágicos para poner fin a una de las peores rachas de la historia de esta franquicia.
Magic Johnson fue uno de los principales artífices de que el número 23 terminara recalando en Los Ángeles para vestir la camiseta oro y púrpura. Fue elegido por Jeanie Buss para hacer frente de este cargo tan importante junto con Rob Pelinka, antiguo agente de Kobe Bryant como General Manager. Los Lakers se encontraban metidos de lleno en una reconstrucción que no parecía terminar a pesar de la evolución de algunos jugadores que apuntaban ser muy prometedores como Brandon Ingram o Kyle Kuzma.
El objetivo principal de la organización era claro, devolver a la ciudad un equipo competitivo como los que siempre han contado en el Staples Center. Desde la lesión de Bryant en 2013, no han sido capaces de volver a los Playoffs. Todo se convirtió en una espiral de dolor tras la muerte de uno de los referentes de la dirección de la franquicia, Jerry Buss. Desde entonces, los problemas familiares se han sucedido y han salpicado de lleno a un equipo que no ha logrado salir del pozo y aún sigue con serios problemas. Magic, que era el destinado a terminar esta tendencia en los despachos, ha puesto fin a su etapa al verse presionado por sacar al equipo adelante.
A qué se debe el adiós de Magic Johnson
Esta noticia ha pillado a todos desprevenidos, y aún se busca una explicación lógica para entender lo sucedido. Uno de los primeros motivos que se vienen a la cabeza son los hipotéticos problemas que haya dentro de la franquicia. En sus palabras, Magic reiteró que tomaba esta decisión porque estaba “harto de recibir puñaladas por la espalda y cuchillos”. No es secreto que la NBA ha tenido que intervenir en varias ocasiones por acciones o palabras de Johnson que han sido interpretadas como violaciones al reglamento de la competición. Se ha visto rodeado de polémica por el famoso “tampering” con varios agentes libres como Kawhi Leonard o Anthony Davis.
Este trabajo puede consumir a cualquiera, sobre todo si no se tiene experiencia previa en esto. Magic tenía la gran responsabilidad de darle la vuelta a la franquicia, a la que le debe toda su carrera profesional y se convierte casi en un conflicto familiar. LeBron James fue el gran regalo de la estrella de los Lakers y todos aplaudieron su esfuerzo para lograr la incorporación del que era considerado el mejor jugador del planeta. Sin embargo, el resto de contrataciones levantaron muchas dudas, ya que por primera vez James no iba a estar rodeado de tiradores sino de generadores de juego.
La franquicia angelina genera bastante odio entre gerentes y aficionados, este fue uno de los principales argumentos a los que recurrió cuando no pudo cerrar el traspaso de un Anthony Davis que dijo públicamente que su deseo era marcarse de New Orleans. “No han actuado de buena fe” afirmó Johnson tras un ‘trade deadline’ un tanto convulso para los Lakers. Al fin y al cabo, Magic no ha conseguido cerrar a ninguna otra estrella a parte de LeBron, por lo que el trabajo sigue sin estar completo y no parece que esto vaya a cambiar de manera drástica.

Otra de las especulaciones alrededor de la dimisión de Magic Johnson es lo que está por venir el próximo verano. Tras una temporada decepcionante donde las lesiones han tenido mucho protagonismo, se espera que los Lakers den un golpe sobre la mesa y logren contratar a varias estrellas de la competición para acompañar a un James que no ha sido capaz de ganar sin All-Stars a su lado. No obstante, esto parece todavía una tarea complicada, puesto que las estrellas han estado dando largas a Los Ángeles y siguen mostrando su deseo de jugar contra James y no a su lado.
Es mejor decir adiós cuando se prevé que el proyecto no logrará marchar hacia delante que hacerlo más tarde con la cabeza agachada. Este puede ser uno de los principales motivos de la decisión de Magic, que no estará al otro lado del teléfono cuando toque negociar con los agentes libres en el próximo mercado. A priori, a pesar del caso tan polémico de Anthony Davis, no parece haya alguna estrella interesada en recalar en los Lakers. Los nuevos encargados tendrán que hacer frente a un gran dilema que puede marcar el futuro del equipo para bien o para mal.
¿Quién debería ser su sustituto?
Uno de los principales problemas que limita las posibilidades de los Lakers a la hora de encontrar un sustituto para Magic Johnson está en la mentalidad de la franquicia por decantarse en nombres cercanos a la historia del club. Nunca se ha visto a nadie ajeno al grupo hacerse con el puesto, lo cual terminará complicando sus opciones de sacar adelante el proyecto. Sin embargo, fuera de la experiencia con los Lakers existen varios candidatos que podrían hacer un trabajo muy interesante trabajando para la familia Buss.
David Griffin ha emergido como un posible candidato para el puesto gracias al hecho de estar desempleado desde que Cleveland Cavaliers decidió despedirle en 2017. Tiene la experiencia de haber formado un grupo capaz de ganar un campeonato, y recordar también que contaba con un gran trato con LeBron James. Este podría ser un factor determinante para una franquicia como los Lakers que quieren formar su grupo alrededor de la estrella de Akron.

En el caso de apostar por alguien cercano a Los Ángeles Lakers, existe la posibilidad de ofrecer el puesto a un Jerry West que lleva más de cinco años haciendo un trabajo excelso en los proyectos en los que ha estado. Actualmente es consultor en la franquicia rival, los Clippers, y anteriormente efectuaba el mismo papel en Golden State Warriors, que ha ganado tres de los últimos cuatro campeonatos. La gran duda está en si a su edad será capaz de afrontar un reto tan ambicioso como este.
Por otro lado, hay varios posibles nombres que estarían encantados de tomar el puesto, aunque se encuentran en estos momentos desempeñando sus labores para otras franquicias. Masai Ujiri se ha destapado como uno de los miembros de la élite de los despachos en la competición, y dar el salto a los Lakers podría ser una de las decisiones más importantes de su carrera. Por otro lado, el sueño podría residir en la posibilidad de contratar a Bob Myers, escultor de Golden State y con pasado cercano a la franquicia, además de haber jugado en la NCAA para UCLA.
Hay muchos nombres para un solo puesto, y los Lakers tienen el deber de desenredar este problema para estar al 100% cuando llegue el verano y la agencia libre. LeBron James también participará de manera activa en la construcción de la próxima plantilla, pero debe tener a un General Manager al lado capaz de tomar las decisiones correctas.