Nadie esperaba que Brooklyn Nets consiguiera la clasificación para los Playoffs. Más bien, todos pensaban que esta franquicia estaría presente en la lotería del Draft un año más, aunque fuera mediante la representación de otros equipos a los que les habían vendido sus rondas en años anteriores. Sin embargo, Kenny Atkinson y Sean Marks han logrado algo impensable, meter a este equipo plagado de jugadores jóvenes y futuras promesas de la liga en la postemporada este mismo año. Han constituido un grupo que, bajo el liderato de D’Angelo Russell, ha ganado mucha confianza entre los grandes y se ha posicionado como uno de los grandes tapados de la temporada.
El pasado sábado eran los encargados de abrir los Playoffs de la temporada 2018/2019, una gran responsabilidad. Para comenzar, delante tenían a uno de los mejores equipos de la Conferencia Este, Philadelphia 76ers, que posee uno de los mejores quintetos iniciales de la liga por detrás de Golden State Warriors. Sin embargo, no dejaron que el miedo les entrara en el cuerpo y firmaron un partido para el recuerdo dominando a sus rivales, y además fuera de casa logrando una victoria muy importante en el primer choque. Lo más destacable es que no fue trabajo de una sola persona. A parte del destacable trabajo de D’Angelo Russell con sus 26 puntos, tuvo a muchos otros compañeros que le apoyaron en tareas tanto ofensivas como defensivas, y ahí se pueden mencionar los nombres de jugadores como Caris LeVert, Ed Davis, Joe Harris y Spencer Dinwiddie.
Ahora, tras haber conseguido lo que nadie pensaba que serían capaces de lograr, aparecen nuevas narrativas en las cabezas de los aficionados que ven a estos Nets con posibilidades de protagonizar una de las grandes sorpresas de la temporada en la Conferencia Este. El año pasado fue el momento de Utah Jazz con la explosión de un Donovan Mitchell que se quitó de un plumazo a unos Oklahoma City Thunder que formaron un Big Three muy ambicioso. Esta vez, porque no, podría ser el caso de unos Brooklyn Nets que llevan mucho tiempo esperando este momento, el de poder decir que tienen un proyecto capaz de ilusionar a sus aficionados. ¿Tienen posibilidades reales de batir a Philadelphia en primera ronda? ¿Si es así, cuáles son las posibles claves?
Kenny Atkinson, la libertad hecha entrenador
Una de las principales claves del éxito de estos Brooklyn Nets está siendo el trabajo de su entrenador Kenny Atkinson. Le asignaron este puesto cuando la franquicia no tenía opciones ni siquiera de acabar entre los tres peores equipos de la temporada, y ha demostrado que con paciencia y un claro desarrollo es posible hacer cualquier cosa. Lo que le diferencia principalmente de su rival en esta ocasión, Brett Brown, es la libertad que da a sus jugadores cada vez que pisan la pista. Jimmy Butler ha criticado en algunas ocasiones las decisiones tomadas por el entrenador, algo que nunca podría pasar en el lado de Brooklyn. D’Angelo Russell ha disfrutado de esta libertad y ha aprendido con una gran naturalidad a compaginarse con el resto de sus compañeros, especialmente con un Jarrett Allen con el que ha formado un dúo muy potente en el pick-and-roll.
Este impacto también se nota en los jugadores de la segunda unidad, donde aparece un Spencer Dinwiddie que se ha establecido como una de las grandes sorpresas del curso regular. El base, más allá de ser el recambio del All-Star del equipo, es una de las principales referencias ofensivas del esquema de Atkinson, ese en el que todo está permitido y en el que se puede ver cómo Spencer Dinwiddie salta a la acción como capataz de la segunda unidad lanzando todos los triples que quiere y disfrutando cuando estos entran por el aro. Los Nets se han basado en ser una franquicia que depende mucho del estado mental de sus jugadores, y bajo esta táctica, se han visto muy favorecidos para incrementar esta confianza.
Sus opciones pasan por la salud de Philadelphia
Pero si hay una clave principal en las opciones de que Brooklyn Nets consiga pasar a las semifinales del este, están en el estado de salud de los Philadelphia 76ers. El jugador que más ha preocupado hasta ahora es Joel Embiid, el cual se especula que forzó su aparición en el primer partido tras haber estado arrastrando unos serios problemas físicos. El General Manager del equipo, Elton Brand, avisó poco antes de que diera comienzo el partido de que el pívot sería duda hasta el último momento, y finalmente decidió jugar poniendo en riesgo su estado físico.
En la pista se notó que el camerunés no estaba dando el 100%, a pesar de las estadísticas conseguidas al final del encuentro que lucieron unos muy saludables 22 puntos y 15 rebotes. Sin embargo, y le pueden preguntar de esto a Russell Westbrook, los números no suelen siempre significar victorias y eso es lo que le pasó a Philadelphia en la noche del sábado. Además no pudieron contar con la aportación de algunos jugadores claves del equipo como Ben Simmons o Tobias Harris, que empezaron los Playoffs de muy mala manera, sin la ayuda del resto de piezas, los Sixers lo tendrán muy complicado para detener a unos Nets hambrientos y con ganas de hacer historia.