James Harden ha sido uno de los jugadores que han pasado por el foco de la atención de los medios de comunicación en las últimas semanas debido a unas declaraciones de su General Manager, Daryl Morey, en un podcast reciente. Morey defendía que el escolta de los Houston Rockets es uno de los mejores anotadores de la historia, y por tanto, mejor que Michael Jordan. A la hora de comparar a estos dos jugadores, Morey no se mordió la lengua para dejar unas declaraciones que han sorprendido y molestado a partes iguales a muchos que consideran que Jordan no ha tenido ni tendrá un jugador que le supere en este aspecto del juego.
“Es un hecho que James Harden es mejor anotador que Michael Jordan. Le das el balón a James Harden y antes de que lo hayas soltado, cuántos puntos genera… Harden es el número uno en este sentido en la historia de la NBA, así es como debe medirse el ataque en la liga”.
Daryl Morey se ha refugiado en un terreno que puede causar mucha polémica, afirmando que la gran estrella de su proyecto, que peleará esta temporada por conseguir un anillo junto con Russell Westbrook, tiene más habilidades ofensivas que un Michael Jordan que dominó su época ofensivamente. Esta comparación de dos épocas distintas ha levantado mucho revuelo entre aficionados, periodistas, y especialistas de la estadística que han salido para defender a una y otra posición, tanto a favor como en contra, de un debate que está dando para largo.
Para poder dilucidar una respuesta entre tantos datos que se han arrojado al aire para intentar defender las candidaturas de uno y otro, pasaremos a hacer un breve repaso de las habilidades ofensivas de cada jugador con sus datos en las mejores temporadas ofensivas de cada uno y dejaremos que esa elección sea tomada por los lectores que decidan decantarse por un lado u otro de esta batalla que, está alimentando esas ganas de ver baloncesto antes de que comience una temporada muy ilusionante cuyo aperitivo será el Mundial de China 2019.
Michael Jordan
Temp. 1986-87: 37,1 puntos por partido, 48,2% TC, 38% usage
Uno de los puntos fuertes para apoyar la candidatura de Michael Jordan como el mejor anotador de la historia está en la era la que formó parte. Por aquel entonces los equipos planteaban una defensa mucho más sólida de la que se puede ver actualmente, y el baloncesto era un deporte mucho más físico que ahora. Los árbitros no mandaban a la línea de personales a los jugadores con tanta frecuencia como lo hacen ahora, algo que puede llegar a beneficiar a Harden, y era capaz de anotar con gran facilidad en la media distancia y en penetración gracias a sus dotes de finalización y a su gran tiro en suspensión.
Los datos siguen estando por delante, Jordan promedió más puntos que James Harden en su mejor temporada ofensiva (37,1), y eso es algo que aún sigue siendo determinante para decantar este debate. El impacto del juego ofensivo de Michael Jordan sobre los resultados de su equipo es el argumento con más peso de todos los que se pueden encontrar en este debate. A peesar de que gran parte de las estadísticas, muchas de ellas surgidas en la actualidad, para medir la eficiencia ofensiva, favorecen Harden, Jordan a sido capaz de proporcionar títulos a su equipo gracias a su anotación, algo que el escolta de los Rockets no ha sido capaz de hacer.
Seis anillos de campeón, siendo en todos ellos el jugador más determinante en la pista y el que más puntos promedió en cada una de las temporadas en las que se proclamó campeón. Al contrario que James Harden, que espera poder poner fin a su mala racha con la incorporación de Russell Westbrook, su gran amigo procedente de Oklahoma con el que ya compartió vestuario para intentar llegar lejos en postemporada.
James Harden
Temp. 2018-19: 36,1 puntos por partido, 44,2% TC, 41% usage
Daryl Morey no hizo otra cosa más que poner los datos sobre la mesa, unos porcentajes que, a día de hoy, siguen siendo difíciles de extrapolar a la era en la que Michael Jordan fue la gran superestrella del baloncesto mundial. Los dos principales factores diferenciales que podrían llegar hacer pensar que Harden es el claro ganador de esta batalla son los tiros libres y el tiro de tres puntos. En primera instancia, Harden ha demostrado ser un especialista en este ámbito para sacar faltas a sus rivales y conseguir tiros libres en la mayor parte de sus posesiones si así se lo propone.
En 10 temporadas de su carrera, Harden ha lanzado un total de 6.536 tiros libres frente a los 8.772 que Jordan dispuso durante toda su trayectoria. Es una realidad que los árbitros ahora caen más en las trampas de los jugadores para ir a la línea, y eso ha beneficiado con claridad a jugadores como Harden para engordar sus estadísticas. Aún así, esto no deja de ser un recurso legal y efectivo para ayudar a su equipo a sumar puntos en el marcador y sobreponerse a sus rivales. Jordan nunca tuvo la oportunidad de aprovecharse de una situación ventajosa como la que James Harden está disfrutando de los últimos años de carrera reciente.
El tiro de tres puntos es otra de las habilidades que colocan a Harden como vencedor en el debate de los mejores anotadores de la historia. Esto tiene que ver, sobre todo, al estilo actual, donde prima mucho más en lanzamiento de larga distancia para sumar de tres en tres que el tiro de media distancia, que tan popularizado estaba durante la época en la que Michael Jordan jugaba en la competición. El escolta de los Bulls nunca intentó más de 297 triples en una temporada, mientras que Harden llegó a anotar un total de 378 la pasada temporada.
Estos son algunos de los datos, y la conclusión es algo que debe partir de cada uno. Es cierto que Harden y Jordan jugaron en épocas completamente diferentes, pero ambos han dejado temporadas de exhibiciones ofensivas individuales para el recuerdo. Aún así, Harden tiene que completar la tarea y llegar, al menos, a unas Finales con este equipo para que la comparación pueda ser más equitativa, pues no sirve de nada destacar en temporada regular únicamente.