El camino de LaMelo Ball hasta el draft de la NBA está siendo poco común al resto de promesas del baloncesto estadounidense, pero parece estar funcionando. Según ha confirmado Jonathan Givony de ESPN, Ball está atrayendo muchas críticas positivas de los ojeadores de la NBA mientras juega para los Illawara Hawks de la NBL australiana.
Según ha confirmado el experto de Draft del gigante estadounidense de la información deportiva, el menor de la excéntrica familia Ball, es uno de los serios candidatos para la ser la elección número 1 en el Draft de la NBA 2020. LaMelo era una de las estrellas del instituto Chino Hills, junto con sus dos hermanos y se comprometió tempranamente a jugar en UCLA, siguiendo los pasos de Lonzo y LiAngelo. Sin embargo, Ball fue sacado de Chino Hills y retirado de UCLA por su padre, mientras que el mediano de la familia era acusado de robo en un partido de pretemporada en China en una tienda de alto diseño.
A partir de ese momento, el camino de Ball ha sido muy poco común al resto. Tuvo que marcharse a Lituania junto con LiAngelo para jugar en un equipo de media-baja tabla. Posteriormente, tras el poco éxito de su hermano en su intento de alcanzar la NBA, se unió al instituto SPIRE de Ohio, donde volvió a ganar protagonismo en su país natal gracias a sus exhibiciones, pero sin poder jugar en ninguna universidad al ser vetado por la NCAA al comercializar sus primeras zapatillas, algo prohibido por los atletas universitarios, que no pueden recibir recompensas económicas.
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Para poder estar entre los mejores del próximo Draft, decidió marcharse a Australia para jugar en la NBL, una liga que ha apostado por ser ese puente hacia la NBA para jóvenes promesas que no quieren pasar por el baloncesto universitario. Sus primeros partidos en Oceanía están llamando mucho la atención de los ‘scouts’.
Según Givony, Ball puede ser el mejor jugador de la NBL y ya es candidato al MVP. 27 ojeadores de la NBA asistieron a un torneo de pretemporada de la NBL para seguir de cerca a Ball y a otra promesa del Draft que decidió marchar a Australia, RJ Hampton. Ball brilló de manera exuberante contra los vigentes campeones de la NBL, los Perth Wildcats, anotando 19 puntos con 13 rebotes y 7 asistencias.
