En el Nou Congost se jugaba una ‘final’ entre los dos equipos que menos victorias han logrado en lo que va de campaña, La Bruixa D’Or y Montakit Fuenlabrada. Un duelo lleno de nerviosismo e imprecisiones por parte de ambos debido a la enorme responsabilidad que tenían sobre sus hombros. El partido se decantaría para los locales aunque una tardía reacción fuenlabreña estuvo a punto de dar la vuelta al marcador en el final del partido.
El encuentro arrancó con dominio local, Rizvic mandaba en el rebote y los suyos encontraban aro, algo que los visitantes no conseguían de ningún modo. Transcurrida la mitad del primer cuarto, Jesús Sala tuvo que solicitar tiempo muerto con 8-0 en el marcador. Cambió el quinteto, pero no cambió el mal juego, ya que Fuenlabrada solamente fue capaz de anotar una única canasta en juego en todo el cuarto, los demás puntos tuvieron que llegar desde el tiro libre para cerrar el primer parcial 13-8.
No fue hasta el segundo cuarto que el Fuenla comenzó a reaccionar, poniéndose a un punto de distancia en el minuto 13, pero Manresa iba a volver a poner tierra de por medio gracias al acierto exterior de White, Fotú y Poeta. Los locales volvían a controlar el ritmo del partido y se alejaban hasta los 13 puntos, antes de que un triple de Josh Mayo redujera la distancia para marchar al descanso con un marcador de 33-23.
El tercer cuarto comenzaría con La Bruixa D’Or haciendo un juego muy sólido con ganas de evitarse apuros a final del partido. Seguían incrementando la distancia de la mano de White y Seeley que lograban un 10-2 en el inicio del cuarto, para continuar llevando a los suyos hasta los 18 puntos de distancia en el minuto 25 (43-25). Sala volvía a buscar un cambio de ritmo parando el partido, y lo lograba con la vuelta a pista de Deji Akindele que con su agresividad a ambos lados de la pista lograba despertar a sus compañeros y endurecer las defensas, reduciendo distancias 47-38.
Llegaba el momento de que uno de los dos equipos diera un paso al frente, y aunque el último cuarto comenzaba con Fuenlabrada en línea ascendente y recortando distancias hasta los 5 puntos, iban a ser incapaces de contener más tiempo a los hombres de Pedro Martínez. El hombre del partido iba a ser Devin White que encontraba a sus compañeros y aro con facilidad pese a la férrea defensa de Alberto Díaz, y además iba a decidir con un robo para anotar a la contra y sellar una victoria que les permite seguir soñando con la salvación. Al final del partido, el marcador se cerró 68-53.
White fue el máximo anotador de la noche con 21 puntos y una valoración de 26, mientras que el líder en anotación y valoración de la liga, Andy Panko, iba a quedarse tan solo en 13 puntos, siendo aún así el máximo anotador de los fuenlabreños. Fuenlabrada ocupa ahora la última plaza de la tabla a una victoria de Manresa aunque logró conservar a su favor el basket average, pensando en lo que pueda suceder en los tres partidos restantes.
68. La Bruixa D’or Manresa (13+20+14+21): White (21), Seeley (11), Sánchez (-) Sakic (10), Rizvic (10) -cinco inicial-, Hernández (-), Grimau (2), Fotu (9), Poeta (3) y Dillys (2).
53. Montakit Fuenlabrada (8+15+15+15): Mayo (2), Sanz (2), Panko (13), Akindele (12), Clark (5) -cinco inicial-, Cevtkovic (4), Vega (-), Díaz (4), Diagne (4) y Miso (7).