Matt Bonner es uno de los jugadores más peculiares, y al mismo tiempo queridos, de los San Antonio Spurs. Y es que pese a que en las últimas temporadas su papel en el equipo ha disminuido hasta convertirse en uno de los últimos de la rotación, ha sabido encajar en su nuevo rol, lo que le ha llevado a convertirse esta temporada, por segunda vez en su carrera, en campeón de la NBA [también conquistó el anillo en 2007].
Así el jugador, que recientemente renovó con la franquicia tejana pese a que, según él mismo, tuvo otros equipos interesados, está en un buen momento, tanto personal como deportivo, y es por eso que ni se plantea por ahora cuando llegará su final. Y de hecho, quiere seguir en activo bastantes años más:
«Tengo la intención de jugar el máximo tiempo posible, de hecho poder seguir hasta los 40sería genial.»
«Iré año a año, y si veo que me siento bien y el equipo me necesita seguiré.»
Lo cierto es que, aunque parezca un objetivo lejano, pues aún cuenta «solo» 34 primaveras, no es descabellado pensar en que podría llegar a lograr su objetivo, dadas las rotaciones realizadas por el conjunto dirigido por Gregg Popovich, en el que ningún jugador cobra un protagonismo vital con el descanso de minutos que eso supone, además del estilo de juego de Bonner, que para nada depende de su físico, pues su rol prácticamente se limita al de ser un tirador.
En la última campaña, Matt Bonner disputó un total de 61 encuentros, en los que estuvo en pista una media de 11.3 minutos, que se tradujeron en 3.2 puntos, 2.1 rebotes y 0.5 asistencias. Con datos así, es más que factible que tengamos a «The Red Mamba» por muchos años más.