En su tercera temporada con los Atlanta Hawks, Marvin Williams tenía como última opción el tiro de 3 puntos. Lo que fuera como último recurso, era un mal necesario.
“En mi tercer o cuarto año en la NBA tire como 10 triples [1 de 10 en 2007-2008]. Literalmente, era cuando el reloj de tiro se acababa”.
La segunda selección del draft en 2005 proveniente de la Universidad de North Carolina se enfocaba en mover el balón. Entonces, Mike Woodson, coach en Atlanta por aquel entonces, le preguntó si en el descanso de la temporada podría trabajar en su tiro de 3 puntos desde la esquina. Entonces vino una transformación en su carrera.
Williams mide 6-9 pies (2.05 metros), llegó a Charlotte teniendo un lugar favorito para su tiro. Tiro el 35.9% de tiros de 3 con su anterior equipo, los Utah Jazz. Sus 84 triples han sido lo máximo que ha metido en sus nueve años de carrera en la NBA.
Eso fue lo que llamó la atención a los Hornets, sobretodo después de que el pívot Josh McRoberts firmara con los Heat de Miami.
Clifford necesita a un tirador de 3 puntos como lo es Williams. Pero no es la única razón por lo cual se convirtió en jugador del equipo de Carolina del Norte.
“Marvin es un buen defensor; tanto en defensa individual como en defensa de pick and roll y tiene la velocidad de reacción para jugar buena defensa», dice Clifford.
“Es muy listo. Cuando está desmarcado, tira; cuando no, pasa”.
Esto no es una exigencia en el enfoque de Clifford hacia su estilo de juego. En los mensajes que están colgados en las paredes del gimnasio se les implora a los jugadores que tiren, que pasen y que se muevan; en definitiva, no que te quedes con el balón si estás indeciso.
Eso no es un problema para Williams, de acuerdo a los comentarios de Al Jefferson, que jugó con él en los Jazz.
“Es uno de los jugadores más listos con los que he jugado. Él sabe ajustar su juego para que el equipo sea mejor. Le voy hacer la vida más fácil y seguramente me hará la vida más fácil a mí».
Williams aprecia los comentarios, pero dice que esto es gracias al buen staff de entrenadores que ha tenido. Desde Roy Williams en North Carolina, pasando por Woodson y otros entrenadores que ha tenido en Atlanta y Utah.
“No voy hacer nada de lo cual no me sienta capaz de hacer o no me sienta cómodo haciendo», comenta Marvin Williams. «Llega un punto en el que tienes que aceptar quién eres y no quién tú piensas que eres. No querrás decirle a la gente lo que pueden o no pueden ser, pero en algún punto en tu carrera tienes que ver quién eres realmente».