Tras la segunda derrota sufrida por LeBron James en el día de Navidad en las nueve ocasiones en las que ha jugado en dicha fecha, los Cavaliers visitarían al otro equipo del Estado de Florida y se trasladarían a Orlando para jugar contra los Magic. Estos, con varios días más de descanso que sus rivales, intentarían aprovecharse de ese handicap favorable.
El partido empezaba con una más que sensible baja para los visitantes, la de Kyrie Irving en su backcourt, tras sufrir una contusión en su rodilla en el partido de del día anterior ante Miami Heat. Era por tanto Matthew Dellavedova el que sustituiría al base titular de los de Ohio en el quinteto. Ante la baja de Kyrie Irving, LeBron y Love empezaron tirando del carro de su equipo, pero un grandísimo Tobias Harris tanto en ataque como en la defensa sobre King James, añadido al gran juego colectivo de los Magic, hizo que se fueran por delante en el marcador al final del primer cuarto por un resultado de 27-32. Los Cavaliers ya habían dado síntomas graves de fragilidad defensiva ante los Heat, y esos síntomas se confirmaban en este primer cuarto. Son demasiados puntos encajados para un equipo que pretende ganar el título.
El segundo cuarto comenzaba con Ben Gordon destrozando a la defensa de los Cavs con tres tiros consecutivos (un triple incluido) y sin respuesta por parte del ataque. Blatt se veía obligado a parar el partido para realizar unos ajustes que servirían para reducir el enorme porcentaje de acierto de los Magic hasta el momento. En ataque los Cavaliers parecían atascados y en Orlando disfrutaban compartiendo el balón y anotando fácilmente. Waiters fue el hombre que acercó a los Cavs en el marcador con 8 puntos en los primeros 5 minutos del 2º cuarto. La defensa empezó a ser más agresiva y los Cavaliers tuvieron un parcial favorable que llegó a ser de 16-6 para empatar el partido. Sin embargo, los Magic no se vinieron abajo y siguieron jugando un buen baloncesto ofensivo para irse al descanso con una ventaja de 4 puntos en el marcador. 49-53 ganaban los locales.
El tercer cuarto comenzaba con un acercamiento de los visitantes con una rápida contestación local en modo de 10-0 de parcial. Aunque volvieron a contestar los Cavs con otro parcial amplio para igualar el marcador nuevamente. Durante varios minutos se mantuvo la igualdad, pero parecía que los Cavaliers no conseguían adelantarse en el marcador, ya que cuando igualaban había respuesta, y cuando tenían posesión para ponerse por delante no conseguían acertar con el aro rival o veían como los Magic provocaban una pérdida. La igualdad seguía firme al final del cuarto y se entraría al último con el partido aun por decidir.
El definitivo último periodo comenzaría nuevamente con esa igualdad que fue la tónica del encuentro. Sin embargo, avanzado ya el cuarto, LeBron James cogió el toro por los cuernos y consiguió por fin poner a su equipo por delante y mantener una cierta ventaja de unos 5-7 puntos. Un espectacular 2+1 del rey y otro de Tristan Thompson fueron claves en el parcial que endosaron los Cavs a los Magic cuando más necesario era despegarse en el marcador. LeBron en los siguientes ataques anotó nuevamente para poner una ventaja de 7 puntos que parecía definitiva, puesto que ya quedaban menos de 3 minutos. A pesar de ello los Magic no se rindieron y pelearon el partido. Oladipo era agresivo en ataque y penetraba con potencia para anotar o conseguir ventajas que sus compañeros pudieran aprovechar. El partido volvía a estar en una sola posesión, con la ventaja de 3 puntos para los visitantes. LeBron se encargaría nuevamente de ampliar esa ventaja a falta de solo 40 segundos con un nuevo 2+1 que ahora sí sería definitivo. Un par de faltas intencionadas después, los Cavaliers ganaban por 98-89.
Una vez más los Cavs nos dejaban con la impresión de que pueden ganar cuando quieran ante rivales más débiles. O mejor dicho, cuando LeBron James quiera. Los Orlando Magic disputaron un buen partido, pero a la hora de la verdad no fueron rivales para unos serios Cavs en defensa y un King James decisivo en ataque.
Los jugadores más destacados fueron los siguientes:
- LeBron James fue el mejor jugador del partido y terminó con 29 puntos –15 en el último cuarto– y 8 asistencias.
- Kevin Love aportó 22 puntos y 7 rebotes, pero no disputó el 4º cuarto.
- Waiters, saliendo desde el banquillo anotó 17 puntos importantes para la victoria de su equipo.
- Nik Vucevic fue el mejor de su equipo con 12 puntos 8 rebotes y 7 asistencias.
- Victor Oladipo disputó también un gran encuentro con 13 puntos y 8 asistencias, dirigiendo el juego de su equipo.
Los Cavs se quedan con un récord de 18-11 en la misma situación en la tabla en la que estaba antes del partido. Los Magic tienen un 11-21 y también se quedan igual que estaban en la Conferencia Este. Los próximos encuentros para ambos equipos serán mañana mismo en Charlotte para los de Orlando a la 1:00; y Cleveland por su parte volverá a casa para jugar contra los Pistons de Detroit.
Box Score del partido: