Los Jazz se presentan está temporada con un objetivo y sobre todo un proyecto claro, la orden clara es «¡a competir!», tras tres años de travesía por el desierto, sin objetivos claros, solo la de conseguir una buena pieza en el próximo draft.
A priori, esta temporada se presenta con una plantilla muy justa, sobre todo en la posición de base, acentuándose con la baja de Exum, y con un problema claro de porcentajes de tiro que tendrá que mejorar mucho. Las pérdidas de balón son también una asignatura pendiente de la temporada pasada.
Con todo esto, el entrenador Quin Snyder apostó todo a la defensa como punto de partida e ir mejorando conceptos de juego paso a paso, pero utilizando siempre como punto de partida la defensa.
Sería difícil encontrar a alguien que no conoce el dicho, el mejor ataque es una buena defensa. Eso es especialmente cierto cuando no tienes un buen ataque. Así que los expertos no estaban equivocados, los Jazz vivirán o morirán por su defensa. Los Jazz abrierón su temporada en su casa en el Vivint Arena, y no era sólo un nombre diferente para la cancha, era un equipo diferente que el que fue, con un balance de 2-1 , se presentaba ante su gente.
Pero esa noche el equipo no tenía ni ataque ni defensa, ahora la pregunta es ¿hay una tercera opción?, en el partido contra Portland realizaron un triste 37 % desde el campo, mientras que Portland hizo 53 %. Gracias a la puntuación fenomenal de los bases de Portland, se hizo evidente que incluso a pesar de una mejora evidente de los Jazz, no tienen un amplio margen para el error. Si la defensa no es fuerte, los Jazz ni siquiera vencen a equipos como Portland, que muchos creen que no entrarán en Playoffs.
A través de los tres primeros partidos de los Jazz, no permitieron 100 puntos la noche. Ocuparon el primer lugar en la liga en defensa de puntuación, sus tres oponentes quedaron a 79.7 puntos, y su defensa (de .413) fue el segundo mejor en la liga en % permitido. También es obvio que los Jazz no son exactamente los Lakers del Showtime.
¿Están esperando a dar espectáculo?. Todo es parte del plan de Snyder. Si los mates voladores fueran su mejor arma, Jeremy Evans seguiría aquí. Los Jazz tiene la intención de frenar a sus oponentes a paso de tortuga.
Este año, no tienen un plan B. Los fans no aman esta énfasis defensiva, sólo dos jugadores – reservas Trey Burk y Alec Burks -estuvieron bien el miércoles, anotando 38 puntos entre ellos. Los Jazz se fueron apenas 5-de-24 desde la línea de 3 puntos. Así, mientras que Stephen Curry deslumbra en California, los Jazz tendrán que hacer el trabajo sucio.
Nos asalta otra pregunta. ¿Será este un equipo interesante de ver? está claro que dependerá de cuánto ganen. Obviamente es más divertido estar asaltando las murallas de la defensa de la fortaleza, pero no todo el mundo puede ser Alejandro Magno. Así que si Snyder tiene suerte, tiene que emplearse a fondo en todos los partidos de temporada regular en la defensa. Si no, adiós a los playoffs.
El equipo ha hecho un buen trabajo de promoción del futuro. El partido fue un lleno total. Pero la defensa sólo se presentó a ratos, es decir, siete robos y cuatro tiros bloqueados en la primera mitad. Pero eso no hizo mucho para frenar los Blazers, que hicieron el 58 por ciento de sus intentos de tiro en el primer tiempo. Los bases Blazer Damian Lillard y CJ McCollum maltrataron a sus homólogos de los Jazz. Mientras tanto, los tiradores Jazz nunca encontraron la canasta. Gordon Hayward hizo sólo 7 de 20 tiros. Encestó una canasta de 3 puntos para acercarse a 49-45, pero momentos más tarde lanzó una buena pedrada. Fue un tiro malo ó posiblemente, un lanzamiento de granadas.
Los Jazz tuvieron solo una excusa con Favors, estaba tocado, el ala-pívot se perdió el entrenamiento del martes, y el miércoles tenía síntomas de la gripe. Él fue incluido en la lista, aunque cuestionable hasta justo antes del partido.
Contra Denver, el equipo se aplicó en realizar una buena defensa y así obtuvieron una nueva victoria importante, pero otra vez dejando a los rivales en guarismos muy bajos, sin llegar a los 90 puntos. A pesar de la falta de su mejor jugador está temporada, Derrick Favors, se supieron sobreponer y Booker le cubrió perfectamente aportando 13 puntos desde el banquillo.
Los de Salt Lake City han empezado poniendo los cimientos para realizar una buena temporada, pero hay que tener en cuenta que es solo el comienzo y el nivel de exigencia que tiene la NBA con dos ó tres partidos por semana, sumado a la juventud de la plantilla, hará muy complicado mantener en todos los partidos el nivel defensivo que su entrenador exige.
Ahora bien está claro, sin ningún otro plan debajo del brazo que la defensa, nos hacemos una pregunta. ¿Serán Los Jazz capaces de disimular sus carencias solo defendiendo?. Los tres próximos partidos contra Memphis, Cleveland y Miami(rivales de primera línea) marcarán como de fuerte es la defensa de los Jazz y nos puede dar una idea de hasta donde pueden llegar este año.