Tras finalizar la anterior semana de la mejor forma posible, era momento para los Golden State Warriors de pasar a la acción en lo que será la penúltima semana de un año 2016 que irá a los libros de historia del baloncesto con el nombre de los Warriors bien grande. Su rival, unos Utah Jazz muy sólidos este año, que han sabido encontrar en el mercado las piezas que necesitaban durante el verano.
El partido tuvo un comienzo de lo más tranquilo en cuanto a anotación se refiere, ya que ningún equipo fue capaz de anotar un único punto cuando ya casi habían transcurrido cuatro minutos del primer cuarto. A partir de ese momento, Jazz y Warriors irían intercalándose entre sí el dominio en el marcador. Sin embargo, un despiste de Utah en dos jugadas finales dejó el marcador del primer cuarto 19-15 para los de la bahía.
El segundo parcial significó un cambio total de actitud para los vigentes subcampeones de la NBA, que llegaron con la actitud que les caracteriza cada vez que está a punto de llegar un aluvión de canastas suyas. Y así se produjo, en efecto, durante apenas los primeros compases del cuarto, en los que los Warriors se alejaron por diez puntos. Para final de cuarto, la desventaja de los de Salt Lake City sería de 55-31.
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La vuelta del intermedio no significó otra cosa que no fuera alargar el ‘momentum’ que los Warriors estaban teniendo, ya que al volver del descanso, lejos de permitir cualquier descuido, los dubs siguieron anotando sin piedad alguna, acechando ya la barrera de los 30 puntos de diferencia, que no parecía ser nada complicada de alcanzar vista la forma en la que estaban jugando los californianos. Finalmente, en el ultimo minuto del cuarto, los Warriors lograron ponerse a treinta puntos de diferencia, aunque finalizó el cuarto 82-54. El cuarto final del partido implicó la clásica tendencia de Steve Kerr cada vez que un partido ya está solucionado en el tercer cuarto; sacar al banquillo a jugar y darle descanso a los titulares. En lo que resto de partido, los suplentes supieron mantener tanto la ventaja como un aceptable ritmo de anotación, dejando el partido en el definitivo 104-74.
El mejor jugador del partido se encarnó en la figura de Stephen Curry, el cual anotó 25 puntos e hizo 3 robos. En los Jazz destacó Joe Johnson, con sus 14 puntos. El próximo partido de los Warriors dará lugar a una gira por el este, que comenzará el jueves en Brooklyn. Los Jazz recibirán en un back-to-back a los Sacramento Kings en casa.